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Monday, May 31, 2004

Todo el año es Festival

Buf! todavía no terminó del todo el Festival Internacional y ya tenemos uno nuevo (o mas bien dos nuevos) en el horizonte. Por un lado, Divercine, el Festival de Cine para Niños (para que Escanlar tenga una nueva oportunidad de decir que el que quiera tener un hijo anarquista lo lleve a Divercine) y el 5to. Festival de Invierno (para que la gente de La Brújula de Radio El Espectador -Villaverde, Minutti- puedan alegar que el criterio de programacion de Cinemateca es que las películas sean del culo del mundo). Para ellos, con amor, películas de Camboya, Irán, Japón, Suiza, Uruguay y muuuucho Fidel (por Oliver Stone y por Ignacio Ramonet).
El Festival de Invierno empieza el 3 de julio, va únicamente en Cinemateca 18 y estas son las películas:

"Dreams That Money Can Buy", de Hans Richter, un ejercicio surrealista del vanguardista Richter. Film de 1946 en siete partes, escritas nada menos que por Max Ernst, Leger, Man Ray, Duchamp, Calder y el propio Richter partiendo del hecho desencadenante de introducir una moneda en una caja de música. Ya que estamos, la música es de Paul Bowles, John Cage, Duke Ellington y Darius Milhaud, entre otros. Uno de los films favoritos de David Lynch.

"Las horas del día", de Jaime Rosales. Un Catalan Psycho, anodino llamado Abel, tipo normal y aburrido que de repente se le da por achurar a alguien, sin resentimientos. Rosales dice querer espantar sin espanto visible. No por nada su declaración de principios, es la cita de Luis Buñuel: 'El creador cinematográfico debe quebrar el optimismo del mundo burgués'. Épater le burgeois, todavía hoy.

"Irma Vep", de Olivier Assayas. Difícil imaginarse esta película sin verla, sobre todo que no tiene demasiado argumento sino más bien que parecen hacer la película para encontrar un guión. Irma Vep es anagrama de Vampire y de lo que trata es de encontrar la manera de metadiscursear sobre el cine con motivo de un rodaje/remake de "Les Vampires" de Feuillade. Con música de Luna y Sonic Youth.

"Demonlover", de Olivier Assayas. Un festival obsesivo, como ven. Corporaciones, espionaje, pornografía, manga japonés y cibersexo. También con música de Sonic Youth. Uno de esos films que prometen pero que uno sospecha no cumplen del todo.

"El círculo/Ringo", de Hideo Nakata. Película japonesa de bajo presupuesto. Una serie de asesinatos de jóvenes relacionados con una cinta de video. Los que la ven, reciben una llamada telefónica y a la semana, ñácate. El círculo tiene una secuela, "Ringo2" que ya veremos si veremos. Esto me hace acordar a una historia verdadera: cuando la película británica "The Madness of King George III" se estrenó en los EEUU, la llamaron simplemente "The Madness of King George", pues los ejecutivos de marketing temían que los americanos no la fueran a ver dado que no habían visto las dos primeras...

"Juez de línea", de Pipe Duran: el inicio de la carrera cinematográfica de Ronald Meltzer, acompañando a Jorge Bolani, de la premiada "Whisky". Hasta donde sé, Melzer no hace de juez, ni de fútbol ni de cine.


FIDEL
"Yo, Fidel Castro", de Ignacio Ramonet ¡Siete videos featuring Castro, el hombre que parloteaba! ¡Y con Ignacio Ramonet! Solo para fanáticos. Los capítulos son: 1. Los orígenes de la revolución, 2. Una juventud rebelde, 3. Asaltando al Moncada, 4. El "Che", 5. Mea culpa, 6. Los infieles, 7. Un mundo nuevo. Qué se puede decir que ya no haya dicho Fidel.

"Comandante", de Oliver Stone. La película más anunciada en Cinemateca y que por las peloteras entre HBO y Stone, nunca se exhibió. Cinemateca la anunció en 3 festivales seguidos y nunca pudo traerla, por lo que se transformó en un chiste interno para nada gracioso. HBO se negó a pasarla y entonces Stone fue e hizo otra película, titulada "Looking for Fidel", que Cinemateca programará en los próximos 4 festivales. Al que no quiera Fidel, ocho platos.

CAMBOYA
"S21, la máquina de muerte Khmer Rouge", "Site deux ans au bord des frontières", "Bophana, una tragedia camboyana" y "La tierra de las almas errantes" de Rithy Panh. Cineasta camboyano, prisionero de campo de rehabilitación a los 11 años y cineasta en París más tarde. Entre 1975 y 1979, el régimen de Pol Pot asesinó a 1:700.000 personas. "S21" fue aclamada como una obra maestra y premiada en el último Festival de Buenos Aires. Para jugar a las siete diferencias entre Rithy Panh y Michael Moore.

CINE IRANÍ
"La manzana", de Samira Makhmalbaf, "El espejo", de Jafar Panahí, y "El silencio", de Mohsen Makhmalbaf. Tres películas para no perderse, si tienen ese gusanito que es el gusto por el cine iraní. Dos películas con firma familiar (padre e hija) y la segunda película de Jafar Panahi, filmada luego de "El globo blanco".

RETROSPECTIVA JULIO MEDEM
Aaargh, I can’t stand Medem y capaz que viene y todo. Pero bueno, se justifica por incluir toooodos los largometrajes de Medem. En programa: "Vacas", "La ardilla roja", "Tierra", "Los amantes del círculo polar", "Lucía y el sexo" y "La pelota vasca". Si no viene, es un ingrato.

THE REST, NOT THE BEST
"Espaldas fuertes", de Ursula Meier. Ni idea, pero que sea una película suiza sobre alguien que quiere triunfar en el deporte, con subtitulaje electrónico y para peor traducida por Ghetta Life, no suena muy alentador.

"Una razón para vivir", de Gérard Jugnot. Un carnicero (no uruguayo, sino francés) protege a niño judío en la Francia ocupada por los nazis. Olvídenlo.

"Shiner", de John Irvin. Michael Caine como un corrupto manager de boxeo que empeña su fortuna para que su hijo enfrente al campeón mundial. Parece que la actuación de Caine vale la película, si os sirve de consuelo.

"Dieciocho años después", de Coline Serreau. Secuela de "Tres hombres y un biberón", con bebé ya crecido, como antídoto a tanta película amarga, pero qué necesidad, si ya estamos acostumbrados.



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Sunday, May 30, 2004

Lecturas no concomitantes

Como Uds. ya saben, padezco esa afición dominguera de ir a la Feria de Tristán Narvaja a buscar libros usados. No era un buen día, hacía frío y yo estaba, bueno, en mal estado. Fui y floté un rato por las calles del Cordón, mientras ingería cocacolitas sin parar. A pesar de que vi libros interesantes, todos estaban demasiado caros. La peste, de Camus, en la preciosa edición de Sur, de tapas completamente negras, El libro rojo de Lenin, de Roque Dalton, El puente de Brooklyn, de Henry Miller, Imagen de John Keats, de Julio Cortázar (John Keats/John Keats/John...). También encontré el célebre ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? de P.K. Dick, pero, para mi horror, lo habían retitulado Blade Runner, y llevaba en la tapa una espantosa ilustración con la cara de Harrison Ford. Que se lo queden.
Al final terminé comprando Un yanqui en la corte del rey Arturo, de Mark Twain, alentada por la frase de la contraportada: "Para todos, sobre todo a partir de 13 años"

El asunto es que volví a casa casi sin qué hojear, así que, aburrida, agarré una Brecha de hace unas semanas. Allí vi el artículo sobre Julio Cortázar en Uruguay, que no había terminado de leer, pues me había resultado mortalmente aburrido, como si de Cortázar y Uruguay poco se pudiera decir. Me llamó la atención que en ese artículo no se hiciera referencia alguna a la relación más interesante de Cortázar con Uruguay y que está en Rayuela. No me refiero al mentado asunto de la nacionalidad uruguaya de La Maga, sino al inefable Ceferino Píriz.

En el capítulo 129 de Rayuela, Traveler leía con deleite las contribuciones que un tal Ceferino Piriz había presentado a un concurso de la UNESCO bajo el título "La luz de la paz del mundo". Ceferino Piriz era un uruguayo que quería ordenar el mundo, clasificándolo por razas, distribuyendo las armas proporcionalmente al territorio, estableciendo "cuantos niños ha de dar a luz, por convención internacional, una mujer", determinando las Corporaciones nacionales que debian componer un país ejemplar. La doceava, por ejemplo, era "la Corporación Nacional de Casas-Criaderos de animales, ocupadas éstas de la Cría Menor o cría de animales no corpulentos: cerdos, ovejas, chivos, perros, tigres, leones, gatos, liebres, gallinas, patos, abejas, peces, mariposas, ratones, insectos, microbios, etc."

Cortázar había accedido al manuscrito de Ceferino cuando trabajaba de traductor para la UNESCO y decidió inmortalizar esa raza de individuos que han visto la luz y conocen el secreto para mejorar el mundo y de los que Uruguay tiene varios exponentes menos célebres. Ya he escrito sobre ellos en otro lugar y en cuanto tenga ganas de hacerlo lo completaré aquí.

Lo que decía era que le eché un vistazo nuevamente a la nota de Brecha, tal vez porque había leído el post de Benito, que unía a Cortázar con Silvio Rodríguez a través de una anécdota extraña. Leí entonces lo que había escrito Angel Rama en su Diario 1973-1983, sobre el tardío entusiasmo de Cortázar por las ideas políticas y lo transcribo, pues me resultó muy llamativo e interesante:

"27 de abril de 1980

Desagrado, cólera y más tarde una larga, larga depresión, cuando oí a Cortázar en el acto de presentación de la revista Sin censura, que él patrocina en París. Me consta su falta de información política y no digamos económica o social, y su escaso discernimiento para la problemática internacional. Como él confiesa, hasta mediados de los sesenta era un literato puro que además nada sabía de América Latina. Lo desgraciado es que no ha hecho reales esfuerzos para informarse mejor, estudiar los problemas y verlos con una perspectiva objetiva. Pero a pesar de que sigue siendo un 'literato puro' opina sobre política con tal simpleza, ignorancia de los asuntos, elementalidad de razonamiento, que produce o descorazonamiento o cólera. A mí las dos cosas y concluyo abominando de los escritores metidos a políticos: concluyen haciendo mal las dos cosas.

En Julio, dentro de ese constitutivo y original funcionamiento enrevesado del tiempo, se oye a un adolescente quinceañero decir simplezas, sobre el exilio, sobre Nicaragua ('en dos años habrán sido resueltos los problemas del país'), sobre los regímenes militares, sobre el socialismo (una simple panacea), sobre los escritores comprometidos.

He defendido siempre su candor (como lo he hecho respecto a Benedetti) y su honestidad; quienes estaban cerca de mí en el acto no compartían mi creencia. Todos sin embargo coincidimos en la penosa impresión dada por su disertación y sus respuestas a las preguntas (infausta fue su explicación de lo ocurrido en la embajada peruana de La Habana, llegando a negar que hubiera 10 mil personas a pesar del testimonio peruano y del reconocimiento cubano) y a mí me volvió a plantear esta espina sobre los prejuicios que estos intelectuales ignorantes de la realidad social, económica y política de nuestros pueblos provocan en las jóvenes generaciones que creen en ellos (porque son buenos escritores, no porque sean políticos buenos) y están dispuestas a aceptar sus juicios. La extrapolación es evidente: aprovechando la autoridad ganada en el campo de la 'literatura pura' se la usa para impartir una doctrina sobre asuntos que le son enteramente ajenos y donde no ha habido prueba de ningún tipo de competencia o de conocimiento serio. Desgraciado equívoco. He conocido sus desgraciadas consecuencias en el pasado y nada parece que ellas hayan contribuido a hacer más serias y responsables las palabras políticas que hoy siguen pronunciando los intelectuales"

Después que leí esto y que pensé un rato en Galeano y en cómo lo que escribe como literatura es tomado por demasiada gente como verdad revelada, seguí leyendo otras cosas, me olvidé de Cortázar, Rama y el Uruguay y agarré una biografía de Bruce Chatwin, de Susannah Clapp. La abrí al azar:

"Tenía sus temas favoritos, asuntos a los que volvía una y otra vez, que ampliaba, eleboraba y remendaba. Uno era el color rojo. ¿Por qué era el rojo el color de la revolución? ¿Obtuvo su significación de la sangre o del fuego? ¿Qué sentido tenía en la Iglesia? ¿Por qué una cultura de los mares del sur se abstenía de usarlo? Volvió de la Unión Soviética sosteniendo que todos los rusos detestaban ese color y años después seguía insertando nuevos datos en sus conjeturas. Cuando conoció a Hannah Rothschild en París, en una cena con Rudolf Nureyev, la agasajó de inmediato con una exposición de su teoría sobre el color mientras la engatusaba para que lo siguiera en una excursión. La había puesto en su mira durante la cena; le preguntó qué hacía en la ciudad y le anunció que tenía un plan para la mañana siguiente: 'La recogeré en su hotel a las seis'. Apareció a las siete: 'Primer paso, el metro'. Durante la media hora de viaje hasta su destino, que resultó ser el Mercado de Pulgas, no paró ni para respirar. Un mendigo envuelto en una manta roja había disparado su conversación camino al metro. Habló del uso político y de la importancia simbólica del rojo, introdujo a fascistas, marxistas, toreros, carniceros uruguayos, a Garibaldi y los Camisas Rojas, sin olvidar el gorro frigio de la Revolución Francesa. Ya en el mercado se encendió nuevamente por los destellos rojos de los más diversos objetos expuestos en las tiendas: el carmesí de un chal budista; el escarlata de una insignia comunista."

Caramba, I'm back in the U R u guay. ¿Carniceros uruguayos? Está bien, Chatwin era un viajero, estuvo en la Patagonia y escribió un libro basado en los seis meses que pasó allí (justamente titulado En la Patagonia) y otro (El virrey de Ouidah) sobre un negrero brasileño. ¿Pero estuvo alguna vez en Uruguay? Este es un trabajo para Brecha.


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Thursday, May 27, 2004

Defensores de oficio

La izquierda históricamente se ha desgañitado denunciando la explotación por parte de las multinacionales, el trabajo infantil, el saqueo capitalista del tercer mundo, el papel de los presidentes de los EEUU para que estas lacras se perpetuaran a lo largo y ancho del planeta y el etcétera más largo que puedan imaginar. Pero han tenido que decirlo desde el primer mundo para que estos reclamos dejaran de ser una mentira comunista y pasaran a ser una verdad aceptada y hasta rodeada de cierto glamour.

El marketing ha venido a revelar su utilidad para quienes desde siempre lo han visto como una táctica mentirosa para vender.
Desde entonces, la voz de los oprimidos la amplifican seres tan ambigüos como Michael Moore y Naomi Klein. ¿Es el precio que debemos pagar para que ciertas ideas salgan de un ghetto fácilmente neutralizable por parte del poder?

Aquí, en español un chismoso artículo sobre Michael Moore del Observer (get a feel of the British press!). Y aquí, Ignacio Ramonet, hablando del activismo (que antes era militancia) antiglobalización, la manipulación de la información y Naomi Klein como guardiana de los medios.

Oiremos hablar de Moore hasta el cansancio (ya estamos cansados), pero, como dice Benito, en su post del 22 de mayo, Moore es The Man.

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No voy ná

Este es parte del mensaje de Fidel Castro al pueblo mexicano explicando por qué no asistirá a la III Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de América Latina y el Caribe y la Unión Europea. El mensaje es inusualmente corto, aunque lo que posteo es sólo el saludo final. Del genuflexo esta vez no dice nada.

"Durante varios días medité en la conveniencia o no de asistir.
Decidí finalmente no hacerlo por varios motivos. (...)
Dejando a un lado la amarga experiencia de lo ocurrido en Monterrey, no existen, a nuestro juicio, las más mínimas condiciones para que una visita mía a ese hermano y entrañable país con motivo de la mencionada reunión aporte resultado constructivo alguno.
Deseo dejar constancia de lo mucho que me duele perder la oportunidad de saludar a hombres como Chávez, Kirchner, Lula, Patterson, y otros brillantes luchadores por un destino mejor para nuestros pueblos de América. Ellos harán lo que puedan, y lo mucho que son capaces de hacer, en los cinco minutos que se les concede dentro de ese cónclave donde, según se afirma, no habrá prensa.

Tal vez en el banquete ceremonial inicial, con oradores muy seleccionados de antemano, entre exquisiteces culinarias, champán y vino que nada tienen que ver con los miles de millones de personas que en el mundo sufren hambre y miseria, se pueda escuchar el eco de las voces de algún verdadero disidente.
Cuba se siente honradísima y óptimamente representada por su brillante y joven Canciller, que en los pocos segundos que le otorguen en un rincón de esa reunión será capaz de expresar verdades imprescindibles.
Sigo creyendo con firmeza que un mundo mejor es posible."

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Tuesday, May 25, 2004

Dios bendiga al té de coca

Hace un tiempito, al futbolista de Nacional Sebastián Eguren, le dio positivo el control antidoping: metabolitos de cocaína. Eguren dijo que cuando jugó en Quito, por la Libertadores, en el hotel le habían dado té de coca.
Ahora, un jugador de Miramar Misiones vuelve a dar positivo en el antidoping por metabolitos de cocaína. La excusa: que tomó té de coca.
OK, no voy a decir que están mintiendo, me importa un pepino lo que tomen. Pero me resulta penosísimo verlos relatar las circunstancias en las que ingirieron el té de marras, que cómo se sabe, es ubicuo en la casa de amigos y familiares de futbolistas.
Como siempre, todo el mundo sospecha que, sea lo que sea lo que hayan tomado, seguramente no lo hicieron para mejorar el rendimiento durante el partido, sino con fines recreativos: un té recreativo con la abuela, una raya recreativa con los amigos.
El problema es que los jugadores no se limitan a decir: tomé un té. Relatan cómo la abuela se los preparó en una inofensiva reunión familiar, cómo increparon a la viejecilla luego de enterarse que el inofensivo té contenía el endemoniado principio activo, como rezaron para que no les tocara el antidoping y cómo, antes de hacerse la prueba, declararon que habían ingerido inocentemente el té prohibido. Lloran, reconocen su error, piden perdón por no habérselo hecho saber al médico y todo el circo.
Y, como si esto no fuera suficiente, después viene Kesman, aconsejando a los inocentes deportistas: "Muchachos, cuídense, la cosa está brava. Tomen mate solo, si toman una cerveza destápenla ustedes mismos y no acepten bebidas de gente que no conocen"

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Sunday, May 23, 2004

Traffic

Todo esto empezo a partir de una conversación con Remo sobre un Citröen 11 Ligero que está en un taller mecánico cerca de nuestro apartamento. El dijo que le gustaría tener uno y yo dije que me habían dicho que tenían problemas en la punta de eje y la caja de cambios. Es que yo también quería tener uno. No sé si ustedes saben de qué auto hablo. Si han visto la película Diva, allí hay un 11 Ligero blanco con faros de yodo. No sé decirles más.

Remo siguió hablando sobre autos franceses, más bien sobre la suspensión y la transmisión de los autos franceses y no sé que más. Yo me distraje. De tanto en tanto escuchaba partes del discurso, tales como "efecto alfombra" y otras que ya no puedo recordar. De repente Remo dijo "Inclusive estos, los patitos, los 3CV. Los franceses le prestan atención a los requerimientos del sexo femenino" -siguió diciendo. Mi atención se fijó en cuanto oí esa frase "¿Por qué?" -quise saber "Porque el volante solo tiene un radio, centrado en la parte inferior". "Así, es imposible perderse. Siempre sabés en qué posición están las ruedas". "¿Y por qué considerás que es así en atención a las conductoras mujeres?" -pregunté...

La respuesta es que las mujeres son más distraídas respecto a lo mecánico. Así, por definición. Ah, esa es una vieja discusión, que he terminado por aceptar. Las mujeres somos más distraídas respecto a lo mecánico y manejamos peor que los hombres porque no escuchamos el motor y otros detalles de vital importancia. No entendemos algo tan sencillo como la lógica tras los cambios de una bicicleta, menos aún los de un automóvil. Así fue como descubrí que Remo cree que no manejo del todo bien.

Yo no estoy de acuerdo. Yo escucho el motor, es imposible no escucharlo en un Fusca. Sólo que la brecha que hay entre 2ª. y 3ª. es justamente donde iría el cambio adecuado para la velocidad standard del tráfico uruguayo.

La manera de transitar en Uruguay es irracional. Y el ordenamiento del tránsito, señalización y fiscalización es simplemente absurda. Me lleva el diablo cuando escucho en los medios que los accidentes de tránsito son la primer causa de muerte entre menores de 35 años ¿y qué querían que fuera? ¿la arterioesclerosis? Es cierto: hay muchos accidentes pero mientras sigan siendo una especie de cuco nacional, van a haber aún más.

Mi teoría es que no son las altas velocidades las que provocan los accidentes sino todo lo contrario. La gente maneja tan despacio que va pensando en cualquier otra cosa. No prestan atención a lo que están haciendo, porque no están haciendo nada. No se avanzan, no ponen cambios, no mueven el volante. Entonces sus desocupadas mentes se vuelan hacia cualquier otro lugar. Tanto las velocidades máximas permitidas como el timing de los semáforos están diseñados como para un tránsito de un Ford Prefect de tres cambios. 45 kms. por hora en Bvar. Artigas. Siete semáforos en rojo en 25 cuadras. Inspectores escondidos para multarte, pero nunca para decirle que se corra al conductor del camión que circula a 20 kms./hora por el carril de la izquierda. Y los policías con espeluznantes motos Guzzi ¿alguien sabe para qué sirven?. No para ordenar el tránsito, eso es seguro.

Mi único encontronazo con un aspirante a Poncharello fue para que me hiciera a un lado a efectos de dejar pasar el ómnibus que traía a la selección de Venezuela. El tipo me dio el susto de mi vida: apareció como un rayo al lado mío haciendo bruscos ademanes de que me corriera o me detuviera. Yo iba por el carril central, por la Rambla, a 70 kms por hora y en los 10 segundos siguientes cometí todas las torpezas que no suelo cometer: me corrí hacia la derecha sin mirar por el retrovisor, me detuve sin razón aparente en plena rambla y estuve a punto de pasarme un semáforo en rojo. Esa es la lógica de la seguridad del tráfico aquí y ahora.

La lógica del tránsito es una materia fascinante. Mecánica de los fluidos. Pero aquí, las arterias están tapadas de obstáculos. Los uruguayos no transitamos: obstruimos. No conducimos: detenemos y somos detenidos. Quien tiene voluntad de conducirse, aún siguiendo las normas de tráfico vigente, se encuentra con que tiene que maniobrar, esquivar, saltear, acelerar abruptamente y frenar de la misma manera, pues está rodeado de artefactos metálicos que se conducen según la lógica de la distracción y de la abstracción de la tarea principal que realizan: llegar de A a B de la manera más económica y razonable posible.

Yo todavía creo que la manera de evitar accidentes de tránsito es mediante el orden y la educación, con carriles diferenciados para el tráfico pesado y prohibición de doblar a la izquierda en las avenidas. Pero hay nuevas teorías que contradicen completamente esta idea.

"Se le llama control de tráfico de 'segunda generación' y es una combinación de ingeniería del tránsito y diseño urbano y que se basa fuertemente en la psicología del comportamiento y la biología evolucionista. (?) Rechaza la idea de separar a los peatones del tráfico vehicular y es un concepto que privilegia la multiplicidad por sobre la homogeneidad, el desorden sobre el orden y la incertidumbre sobre la certidumbre. En la práctica, de lo que se trata es de borrar los límites: entre la calle y la vereda, entre los autos, los peatones y los ciclistas y, más controversialmente, entre los vehículos en marcha y los niños jugando."

"La historia de la ingeniería del tráfico -dice el ingeniero y urbanista Ben Hamilton-Baillie- es la del esfuerzo por racionalizar el caos. Hoy entendemos que el caos puede ser provechoso."
Hamilton-Baillie dice que la mejor manera de aumentar la seguridad y capacidad vehicular de las calles es sacando los semáforos y otras señales de tránsito, como las señales de 'Pare' y las líneas que demarcan los carriles. Argumenta que sin señales que indiquen la preferencia en la circulación, los conductores se verán forzados a andar más despacio, a establecer contacto visual con los peatones, ciclistas y otros conductores, y decidir, entre todos, cual es la manera más segura de proceder.

"Cuanto más control y señales de tránsito haya, el conductor usa menos sus propios sentidos. Cuanto menor sea la presencia del Estado en términos de autoridad, más efectivo será"
Este sistema se está aplicando con éxito en Holanda, Bélgica, Francia, Dinamarca y Alemania.
"Lo que se han dado cuenta es que hay una relación biunívoca entre los peatones y los vehículos. Es un círculo vicioso, o más bien un círculo virtuoso: cuanto más transitada es una calle, más segura. Por lo tanto, en cuanto se saca a los peatones de las calles, se transforman en menos seguras"

"En cuanto se enfatiza la separación, es mucho más peligroso pues el conductor tiene prioridad. Y si un niño se distrae un momento y sale corriendo tras la pelota, se produce un desastre"
Por su parte, David Engwicht, defensor de esta teoría subraya: "Controlar la propensión natural del conductor a acelerar es inútil. Un acercamiento más efectivo es comprometerlo con el tránsito enfatizando los elementos de incertidumbre e intriga en el entorno, por ejemplo, plantando un árbol en medio de la calle en lugar de poner una señal de 'Pare'"
"La señalización standard debe ser reducida al máximo ya que generan predictibilidad y no incertidumbre. También refuerza la idea de que la calle pertenece a los autos exclusivamente"

Tal vez si estos ingenieros vinieran a Montevideo, se darían cuenta que eso es lo que sucede exactamente aquí. Que vas despacio no hay dudas, pero no por ello disminuyen los accidentes. Tenemos hasta el ombú plantado en medio de la calle. Pero el error es creer que la atención del conductor es directamente proporcional al caos. El tránsito es como la danza. Cuanto más confíe en que mi compañero va a seguir correctamente sus figuras, mejor podré yo seguir las mías.
No hay nada más peligroso que un ecologista del tránsito entusiasmado con la teoría del caos.

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Friday, May 21, 2004

Dos dudas musicotelevisivas

La primera es sobre Roberto Moar y la música pop judía. De repente, en Quinto Stone, entre los usuales clips de Shakira, Christina Aguilera y Lenny Kravitz, aparece un video clip o simplemente un pedazo de un programa de entretenimientos, donde toca "en vivo" un desconocido grupo pop israelí. Así, como si fuera lo más normal del mundo. Es decir, no es que aparezca un día un desconocido grupo boliviano, otro un programa de entretenimientos donde aparece un grupo pop húngaro y otro una ignota orquesta coreana. No: siempre un ignoto grupo o artista pop judío. En realidad me da igual. Pero me llama la atención que si, por alguna razón, Moar ha decidido que debe difundir esta música y no otra, lo haga de una manera tan silenciosa respecto a los motivos de una decisión por lo menos extraña.

La segunda es sobre la propaganda de Cabal, que seguramente todavía no han visto y que muestra gente en medio de un berrinche por comprarse cosas: un niño con un juguete, una vieja que quiere comprarse una mascota, una señora que insiste en comprarse ropa, etc. La música es "No rain" de Blind Melon, muy levemente disfrazada. Me encantaría saber si en la factura de la agencia, Cabal ha pagado por la composición de la música del comercial.

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Más drogas (es que generan adicción)

Posteo aquí un nuevo artículo del largo dossier de The Economist, sobre drogas ilegales. Este artículo en particular, analiza brevemente la historia de las prohibiciones.

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Thursday, May 20, 2004

Antropólogodepredadores

He leído sin asombro las palabras de Michael Savage posteadas por Benito en su blog y sus dichos me han hecho acordar a otro aspirante a antropólogo, el Capitán Jorge Tróccoli, estudiante de Antropología en la Facultad de Humanidades y notorio torturador.
Savage (qué querés, con ese apellido) se atreve a decir en voz alta lo que muchos piensan. Tróccoli también lo hizo, pero como es un hombre apegado a las letras, escribió un libro: La ira de Leviatán
El libro fue respondido por el psicoanalista Daniel Gil, con otro libro titulado El capitán por su boca muere o La piedad de Eros: ensayo sobre
la mentalidad de un torturador


Tróccoli, anda por ahí paseando, hoy 20 de mayo, mientras miles marchan para que de una puta vez se resuelvan los asesinatos de Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruiz y tantos otros asesinados y desaparecidos durante la dictadura.
En estos asesinatos están involucrados civiles incivilizados como Juan Ma. Bordaberry y Juan Carlos Blanco. Y si la ley de caducidad, oportunamente votada cuando todavía se agitaba el fantasma de las botas, no permite que torturadores como Tróccoli terminen tras las rejas, es menester juzgar a quienes todavía se puede juzgar por ley e investigar lo que manda la ley.

Las andanzas de Tróccoli siguen y seguirán, porque al Capitán no le pesa su conciencia, como tampoco a Savage, quien por lo menos sólo habla, pero no ha hecho lo que quiere que otros hagan por él.
La última de las andanzas de Tróccoli, hace menos de un año, fue presentarse en la casa de Mercedes Espínola, hija de Paco, detenida y torturada durante la dictadura, para proponerle publicar las obras de su padre en Biblioteca del Tercer Milenio, una biblioteca virtual. Mecha, que sin saber de quién se trataba, lo acogió en su casa y compartió con él unos mates, todavía no se recupera del desparpajo de este hijo de puta, tal vez porque todavía cree que los humanos deben tener, tarde o temprano y por definición, un resto de humanidad.
Tróccoli piensa que la sociedad uruguaya cree, como él, que no ha cometido delito alguno. No es una lectura falsa, sin embargo. La sociedad uruguaya se autoprivó del derecho de juzgar a los torturadores y deberá vivir con ellos, hasta que la misma gente decida modificar la ley. Lo que no quita que, mientras tanto, en público y en privado recordemos quien es ese hombre que pasea tranquilamente a su perrito beagle y pretende ser antropólogo y editor.

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Poetest

Me ha sorprendido lo recurrente que es la queja de los conservadores norteamericanos sobre lo que llaman "déficit de atención" de los ciudadanos de los EEUU.
Para chequear si ustedes están siendo afectados por este síndrome, les propongo leer el siguiente poema de Carlos Germán Belli, poeta peruano y legítimo heredero de Góngora y Vallejo. Si lo siguen hasta el final sin hacerse un lío, es que están a salvo.

La verdad es que disfruto enormemente de la poesía de Belli, prácticamente desconocida (como casi la totalidad de la poesía latinoamericana actual, salvo deshonrosas excepciones) y no se me ocurría ninguna excusa para postear algo de él. Si bien la excusa es muy mala, espero que la poesía les parezca buena. En Montevideo, todavía puede encontrarse en librerías de usados, el libro de Belli Más que señora humana, publicado por Ediciones de Uno en 1987. En 1967 se publicó en Montevideo El pie sobre el cuello, libro que jamás he encontrado.



SEXTINA DE LOS DESIGUALES

Un asno soy ahora, y miro a yegua,
bocado del caballo y no del asno,
y después rozo un pétalo de rosa,
con estas ramas cuando mudo en olmo,
en tanto que mi lumbre de gran día
el pubis ilumina de la noche.

Desde siempre amé a la secreta noche,
exactamente igual como a la yegua,
una esquiva por ser yo siempre día,
y la otra por mirarme no más asno,
que ni cuando me cambio en ufano olmo,
conquistar puedo a la exquisita rosa.

Cuánto he soñado por ceñir a rosa,
o adentrarme en el alma de la noche,
mas solitario como día u olmo
he quedado y aun ante rauda yegua,
inalcanzable en mis momentos de asno,
tan desvalido como el propio día.

Si noche huye mi ardiente luz de día,
y por pobre olmo olvídame la rosa
¿cómo me las veré luciendo en asno?
Que sea como fuere, ajena noche,
no huyáis del día; ni del asno, ¡oh yegua!;
ni vos, flor, del eterno inmóvil olmo.

Mas sé bien que la rosa nunca a olmo
pertenecerá ni la noche al día,
ni un híbrido de mi querrá la yegua;
y sólo alcanzo espinas de la rosa,
en tanto que la impenetrable noche
me esquiva por ser día y olmo y asno.

Aunque mil atributos tengo de asno,
en mi destino pienso siendo olmo,
ante la orilla misma de la noche;
pues si fugaz mi paso cuando día,
o inmóvil punto al lado de la rosa,
que vivo y muero por la fina yegua.

¡Ay! ni olmo a la medida de la rosa,
y aún menos asno de la esquiva yegua,
mas yo día ando siempre tras la noche.


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Piques

Lo que sigue es un extracto en cinco partes del boletín electrónico del Projeto ProArte Brasil que recopila información sobre:

BECAS DE ESTUDIO Y AYUDAS DE PRODUCCION
OFERTAS DE TRABAJO
OPORTUNIDADES
NOVEDADES EN INTERNET
PREMIOS Y CONCURSOS

El Proyecto ProArte Brasil es una coalición virtual dedicada a promover el reciclaje profesional, el intercambio cultural y el acceso democrático a las nuevas tecnologías digitales.
Lo dirigen Patricia Martin y Alfredo Calvino y recopila fundamentalmente información sobre becas, concursos, seminarios, pedidos de trabajo etc. de todas las ramas de la cultura, aunque con cierto énfasis en el área audiovisual, sin descuidar la literatura y los estudios humanísticos. Se pueden suscribir al envío de información en: http://ar.groups.yahoo.com/group/proarteclipsESP/

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Wednesday, May 19, 2004

La pobreza de espíritu

El ex-presidente Julio Ma. Sanguinetti dijo hoy en ADM que, fundamentalmente, el gobierno debe ocuparse no de la pobreza, que es un problema económico (¡bah!), sino de la marginalización, que es un problema social y cultural. Suponemos que Sanguinetti se está refiriendo entonces a la creciente marginalización cultural de las clases media y alta, cada vez más lejos de cualquier cosa que pueda entrar bajo la denominación de educación o cultura, porque de la pobreza y marginación de las clases bajas, él, su partido y sus aliados en el gobierno, son los principales responsables.

Es increíble la capacidad de los figurones de los partidos tradicionales para referirse a los problemas del país como si ellos nunca hubieran estado en el gobierno.
El aislamiento del fenómeno de la marginación del de la pobreza, no es más que cinismo, disfrazado de análisis intelectual (como todos saben, Sanguinetti ES un intelectual). Nada de prosaicos problemas materiales, sino poéticos problemas del espíritu.

Parece claro que la marginación social es producto de la perpetuación de la pobreza a través de las generaciones. Perpetuación y ahondamiento en los que Sanguinetti parece no tener absolutamente nada que ver. En vistas que la charla era en la Asociación de Dirigentes de Marketing, estamos autorizados a pensar que, en realidad, Sanguinetti se dirigía a los políticos y empresarios presentes, a esa masa de incultos que no tienen la buena excusa de la pobreza.

Para no ofender a este señor que pretende ser intelectual y para venir en su auxilio, asumamos que hablaba de los masificados que tenía enfrente y cito al poco sospechoso Ortega y Gasset, en cuyo diario madrileño escribe Julio María:

"La misión del llamado 'intelectual' es, en cierto modo, opuesta a la del político. La obra intelectual aspira, con frecuencia en vano, a aclarar un poco las cosas, mientras que la del político suele, por el contrario, consistir en confundirlas más de lo que estaban. Ser de la izquierda es, como ser de la derecha, una de las infínitas maneras que el hombre puede elegir para ser un imbécil: ambas, en efecto, son formas de la hemiplejía moral. Además, la persistencia de estos calificativos contribuye no poco a falsificar más aún la 'realidad' del presente, ya falsa de por sí, porque se ha rizado el rizo de las experiencias políticas a que responden, como lo demuestra el hecho de que hoy las derechas prometen revoluciones y las izquierdas proponen tiranías. (...)

El politicismo integral, la absorción de todas las cosas y de todo el hombre por la política, es una y misma cosa con el fenómeno de rebelión de las masas que aquí se describe. La masa en rebeldía ha perdido toda capacidad de religión y de conocimiento. No puede tener dentro más que política, una política exorbitada, frenética, fuera de sí, puesto que pretende suplantar al conocimiento, a la religión, a la 'sagesse' -en fin, a las únicas cosas que por su sustancia son aptas para ocupar el centro de la mente humana-. La política vacía al hombre de soledad e intimidad, y por eso es la predicación del politicismo integral una de las técnicas que se usan para socializarlo. (...)

La muchedumbre, de pronto, se ha hecho visible, se ha instalado en los lugares preferentes de la sociedad. Antes, si existía, pasaba inadvertida, ocupaba el fondo del escenario social; ahora se ha adelantado a las baterías, es ella el personaje principal. Ya no hay protagonistas: sólo hay coro.
El concepto de muchedumbre es cuantitativo y visual. Traduzcámoslo, sin alterarlo, a la terminología sociológica. Entonces hallamos la idea de masa social. La sociedad es siempre una unidad dinámica de dos factores: minorías y masas. Las minorías son individuos o grupos de individuos especialmente cualificados. La masa es el conjunto de personas no especialmente cualificadas. No se entienda, pues, por masas, sólo ni principalmente 'las masas obreras'. Masa es el 'hombre medio'. De este modo se convierte lo que era meramente cantidad -la muchedumbre- en una determinación cualitativa: es la cualidad común, es lo mostrenco social, es el hombre en cuanto no se diferencia de otros hombres, sino que repite en sí un tipo genérico. (...)

En rigor, dentro de cada clase social hay masa y minoría auténtica. Como veremos, es característico del tiempo el predominio, aun en los grupos cuya tradición era selectiva, de la masa y el vulgo. Así, en la vida intelectual, que por su misma esencia requiere y supone la calificación, se advierte el progresivo triunfo de los seudointelectuales incualifícados, incalificables y descalificados por su propia contextura. Lo mismo en los grupos supervivientes de la 'nobleza' masculina y femenina. En cambio, no es raro encontrar hoy entre los obreros, que antes podían valer como el ejemplo más puro de esto que llamamos 'masa', almas egregiamente disciplinadas."

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Tuesday, May 18, 2004

Borrelli y los consumidores de drogas ilegales

El Ministro del Interior ha abogado por cambiar la norma que no pena el consumo de drogas alegando que en ella se amparan los pequeños traficantes. Se ha quejado incluso de que la cantidad mínima permitida a un consumidor sea determinada por los jueces y no por la ley. Ha dicho que por supuesto no cree que hay que penar al consumidor, que éstos son enfermos que hay que internar, pero que hay que investigar a aquellos que tienen cantidades que llevan a pensar que además de consumir, distribuyen.
Creo que actualmente la cantidad que se admite para un consumidor son unos pocos gramos, lo que ya obliga al consumidor, si no quiere ser pasible de una acusación de suministro, a tener que ir al supermercado a comprar la yerba y el azúcar por gramo.

Obviamente, quien fuma tabaco compra uno o dos paquetes, pues basta ir hasta la esquina para conseguir la "ansiada droga". Es obvio que quien fuma marihuana u otras drogas habitualmente, y que es obligado por las normas vigentes a cometer una falta cada vez que compra, se provee de la cantidad necesaria para cubrir su consumo por un tiempo más o menos razonable, pero la cantidad en su posesión lo convierte automáticamente en un distribuidor. La prueba de la distribución no puede estar dada por la cantidad de droga en posesión del individuo sino porque se pruebe, por una actividad positiva, que la persona distribuye.
Por otra parte, a los ojos de la ley, tener una planta es casi como tener un laboratorio. Parece ser más grave, entonces, que el consumidor se autoprovea a que forme parte de la cadena de distribución, alentando los delitos que los guardianes de la ley quieren evitar.

Lo de Borrelli es el viejo truco de ampliar la represión a los consumidores con la excusa de detener el narcotráfico. Esto va a contrapelo de todos los informes sobre la mejor manera de afrontar el problema de las drogas, que han demostrado que la represión indiscriminada es lo que menos funciona.
Pero quién puede sorprenderse, en este país donde Stirling se ha hecho famoso quemando marihuana y cocaína, como si fueran brujas.

He decidido poner a disposición, a pesar de lo viejo que es (julio, 2001), un largo dossier de The Economist, sobre la legalización de las drogas. Como todos saben The Economist, es una revista inglesa, conservadora en lo político y liberal en lo económico . Pero en algunas materias, para la ceguera habitual uruguaya, The Economist, parece escrito por un montón de anarquistas drogones. Como el dossier es largo y mi capacidad de traducción limitada, van los primeros dos artículos de, glup, once. Es muy interesante que el enfoque de The Economist, sea, como no podía ser de otra manera, fundamentalmente económico y no político, médico, moral, policial, etc. Lo siento pero me temo que los links a los artículos originales se han perdido en las arenas del tiempo. El primero, introductorio, está aquí y el segundo aquí.

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Oh, russians

Le dicen El Goblin y es el nuevo ídolo de la masiva industria del video pirata ruso. Dmitri Puchkov, un ex policía de San Petersbugo, empezó traduciendo los corrientemente apestosos subtítulos de las películas piratas, pero al final se decidió a reescribir los guiones, empezando por las dos primeras partes de El Señor de los Anillos.
"En un cambio que revolucionó la industria pirata rusa y enfureció a los tradicionalistas y abogados defensores del copyright, Puchkov ha alterado completamente el guión, transformando a los personajes 'buenos' como Frodo, en incompetentes policías y los Orcos 'malos' en gangsters.
Esta nueva e irreverente versión de El Señor de los Anillos se desarrolla en Rusia. Frodo Baggins se llama Frodo Sumkin (un derivado de la palabra rusa sumka, que significa bolsa). Aragorn se llama Agronom (granjero, en ruso). Legolas es bautizado Logovaz, que es el nombre de la fábrica de autos responsable del modelo Lada. Boromir se transforma en Baralgin, nombre de un analgésico ruso compuesto de paracetamol. Gandalf pasa mucho rato en el film tratando de impresionar a los otros con su profundo conocimiento de las teorías de Karl Marx y Frodo utiliza la manera de hablar soez de los criminales rusos. (...) El próximo video de Puchkov será una versión cómica de Star Wars." En inglés, artículo del Guardian, aquí.

Los nombres elegidos parecen bastante azarosos, más bien basados en la homofonía, pero habría que ver qué les hace decir Puchkov en la película. De todas maneras pagaría por ver a Gandalf high on Marx.

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Monday, May 17, 2004

Saint Ampleforth

Voy a emprender una campaña para que la Academia Británica canonice a Ampleforth. ¿Se acuerdan de él? Es uno de los compañeros de trabajo de Winston Smith en el Ministerio de Verdad, en 1984 , la genial novela de George Orwell.

Ampleforth es el encargado de depurar los textos poéticos de palabras que se han vuelto inconvenientes para el régimen de Oceanía.
El fragmento de 1984 , en el que Ampleforth relata los motivos por los que ha sido apresado, es conmovedor y, a la vez, muestra claramente lo obsesionado que puede estar un estudioso con su tarea, de manera que no le importe nada más.
En pocas palabras, un verdadero santo.

Traduzco con el perdón de todos los presentes:

'Ampleforth,' dijo [Winston].

Ningún grito salió de la telepantalla. Ampleforth se detuvo, levemente sorprendido. Sus ojos se focalizaron lentamente en Winston.

'¡Ah, Smith!' dijo. '¡Tú también!'

'¿Por qué estás aquí?'

'Para decirte la verdad.. ' Se sentó torpemente en el banco de enfrente a Winston. 'Hay un solo delito ¿no es así? -dijo.

'¿Y lo has cometido?'

'Aparentemente lo he hecho.'

Se puso la mano en la frente y presionó sus sienes por un momento, como si tratara de recordar algo.

'Esas cosas pasan' comenzó a decir vagamente. 'Puedo recordar una instancia -una instancia posible. Fue una indiscreción, sin lugar a dudas. Estábamos produciendo una versión definitiva de los poemas de Kipling. Permití que la palabra "God" permaneciera al final de un verso. ¡No pude evitarlo! -agregó casi indignado, levantando el rostro para mirar a Winston. 'Era imposible cambiar el verso. Rimaba con "rod". ¿Se da cuenta que hay sólo doce palabras que riman con "rod" en toda la lengua? Días y días me devané los sesos. No había otra rima posible.'

La expresión de su rostro cambió. El enojo pasó y por un momento pareció casi satisfecho. Una especie de tibieza intelectual, el goce de un pedante que ha encontrado una verdad inútil, brilló a través de su pelo sucio y enmarañado.

'¿Se le ha ocurrido alguna vez', dijo 'que toda la historia de la poesía inglesa ha estado determinada por el hecho de que el inglés tiene pocas rimas?'


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Estereotipos nacionales

A raíz de los comentarios del commentatore aka sigmur, sobre los "prejuicios nacionales", recordé una reseña de David Ignatius, aparecida en el Washington Post, sobre el libro del historiador Niall Ferguson, Colossus - The Price of America's Empire. La pertinencia es lateral, pero igual me parece interesante.

En este libro, Ferguson celebra el rol de los EEUU como imperio, pero argumenta que los EEUU se rehúsan a aceptar las responsibilidades políticas y morales que implica dicho poder imperial.
"Esta falla molesta a Ferguson, quien cree que sin la fuerza dominante de un imperio, el mundo será más fragmentado y peligroso que nunca. 'Estoy fundamentalmente a favor del imperio' -escribe- 'Creo que el imperio es más necesario en el siglo XXI que nunca antes' El imperialismo liberal, argumenta, es el complemento político militar necesario a la globalización económica"

"La América de Ferguson nació para ser un imperio. Los padres fundadores poseían la autoconfianza imperial, y la nueva nación extendió sus límites sin cesar hasta que dominó Norte América. Se transformó en una potencia naval y conquistó lo que hoy equivaldría a colonias de ultramar -al tiempo que insistía en su diferencia de los poderes Europeos que le habían dado origen. Ferguson cita a Herman Melville en una proclamación de identidad nacional de mediados del siglo XIX, que hoy resonaría en la Casa Blanca: 'Nosotros, los Americanos, somos el pueblo especial, elegido, el Israel de nuestro tiempo; somos los depositarios del arca de las libertades del mundo'.

"A pesar del poder de los EEUU y su sentido de destino manifiesto, esta nación nunca desarrolló lo que Ferguson describe como una apreciación madura de su rol en el mundo. Comparte el diagnóstico de Walter Lippmann: 'Seguimos pensando en nosotros mismos como una especie de Suiza grande y pacífica, mientras somos, en realidad un gran poder mundial en expansión... Nuestro imperialismo es más o menos inconsciente". Al fallar en asumir la realidad de su poder, América ha fallado en sus intervenciones en el resto del globo. La guerra de Corea demostró 'el carácter auto limitado de la República Americana', escribe Ferguson. En Vietnam, América prefirió 'la irresponsabilidad de la debilidad' a la responsabilidad del poder. La aversión a usar el poder se ahondó en los años de Clinton, donde Ferguson anota que la chance de que un soldado norteamericano muriera en acción era 1/160.000. América tiene poder pero no la voluntad de usarlo."

(...)

"América descepciona a Ferguson porque no es la Gran Bretaña del siglo XIX. Ferguson enumera las virtudes del Imperialismo Británico con el entusiasmo de un escolar victoriano. El Imperio Británico generosamente exportó capital a las naciones necesitadas del mundo; mantuvo los mercados abiertos, lo que permitió a las colonias vender sus productos y mejorar sus standards de vida, administró el Imperio de con los mejores y más brillantes recursos (acorde a Ferguson, el 75% de los empleados de gobierno indios en 1830 estudiaron en Oxford o Cambridge)"

"Ferguson identifica tres déficits de los estadounidenses que impiden que pueda emular el Imperio Británico. El primero es económico: América es una superpotencia en el derroche, que desde mediados de los '80 ha necesitado importar capital del exterior para financiar su déficit fiscal y comercial. El segundo es la fuerza de trabajo: desde su punto de vista, los EEUU no tienen tropas y diplomáticos suficientes para controlar el mundo. Lo peor de todo -dice Ferguson- es el déficit de atención de los norteamericanos. La nación carece de la fijación en el poder para poder ver a través de sus aventuras en el exterior."

"El argumento del libro -que el mundo necesita al Imperio Americano pero que los americanos son incapaces de llevarlo a cabo- es provocativo pero no convincente. Para mí, el libro oscurece las cosas al comparar a los EEUU con una versión idealizada de la Gran Bretaña Imperial. Nosotros, los americanos, en realidad pasamos demasiado tiempo deseando ser Gran Bretaña. La CIA se pregunta por qué no puede espiar como la MI6, cada presidente tiene fijación con el resoluto Winston Churchill como modelo secreto, y en toda crisis, escuchamos la voz de Margaret Tatcher susurrando: "no vacilen"

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Yo me pregunto, entonces, por qué será que los Británicos no son capaces de enderezar, aunque sea un poco, el desaguisado de Irak. El problema deben ser los laboristas. Labour is not working, como dicen los conservadores. So it goes.

¿Necesitamos un Imperio? Que ellos lo necesitan, parece evidente. El resto del mundo es el lugar geográfico donde están los pozos de petróleo, las reservas de agua, etc. etc. etc. El detalle molesto es que esos lugares están llenos de gente marrón.

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Sunday, May 16, 2004

Un Vonnegut fresquito

El viejo Kurt está cansado y refrita escritos anteriores (no me acuerdo dónde, tal vez en Timequake, escribió la misma anécdota sobre su hijo Mark y las palabras de Eugene Debs ¿dónde?). Está bien, a veces Vonnegut se parece a China Zorrilla, contando las mismas anécdotas una y otra vez, pero, siempre vale la pena leerlo, mientras que con China uno esperaría que le haga honor a su apodo y reprima un poco tanta libertad de expresión. El artículo es sobre la guerra, sobre los EEUU y sobre el petróleo y se publicó en In These Times, el 12 de mayo, 2004. Se titula 'Cold Turkey'.

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Saturday, May 15, 2004

El fantasma de John Keats

Hace unos días, cuando estaba escribiendo el post sobre los libros de la feria de Tristán Narvaja y me encontré con la referencia de Stephen King a Borges como "gran escritor de lo macabro", empecé a buscar mentalmente algún cuento que pudiera entrar en esa categoría. Al final terminé acordándome de La intrusa, relato bastante macabro a fin de cuentas, pero en ese momento no podía recordar el nombre del cuento. Así que con todo el dolor de mi espalda, fui a buscar el libraco. No encontré el cuento entonces, porque, como siempre sucede, me enganché a leer otra cosa, en este caso, El ruiseñor de Keats.

Como ustedes saben, en ese escrito Borges se extraña de que la crítica inglesa no haya leído correctamente la penúltima estrofa de 'Oda a un ruiseñor' en el sentido de señalar que el ruiseñor de Keats es el ruiseñor platónico, en tanto que el individuo es la especie. Pero lo más interesante es la explicación que da Borges a la omisión de la crítica inglesa: el problema está en la mente británica. "Los hombres, dijo Coleridge, nacen aristotélicos o platónicos; de la mente inglesa cabe afirmar que nació aristotélica. Lo real, para esa mente, no son los conceptos abstractos, sino los individuos; no el ruiseñor genérico, sino los ruiseñores concretos. Es natural, es acaso inevitable, que en Inglaterra no sea comprendida rectamente la 'Oda a un ruiseñor'. (...) Un escrúpulo ético, no una incapacidad especulativa, le impide traficar en abstracciones, como los alemanes." (enter sigmur)

El tema del nominalismo es muy caro a Borges y ha dado pie a un muy interesante libro de Jaime Rest llamado El laberinto del Universo (Borges y el pensamiento nominalista). Quizá quien más ha aprovechado esta "veta" borgeana haya sido Umberto Eco, poniendo a dos nominalistas como Jorge de Burgos (moldeado sobre Borges) y Guillermo (moldeado sobre Occam) a luchar por un libro de Aristóteles. Pero este post no era sobre Borges, sino sobre Keats....

El texto de Borges me llevó a leer su poesía, que había leído escasamente. Es que, a estas alturas y en esta parte del mundo, John Keats y todos los poetas románticos se han vuelto prácticamente ilegibles. Tal vez, los últimos lectores de Keats por estos lares hayan sido Borges, Cortázar y (tal vez) las poetas del ‘45. Leyendo a Keats y luego a los poetas románticos uruguayos, uno tiene la impresión de que quienes no serían posibles sin los poetas románticos son los modernistas. Los románticos rioplatenses imitaban a los imitadores de Byron, como Espronceda y Bécquer el romanticismo inglés les llegó filtrado por los franceses y los españoles.

Leyendo la crítica de Zum Felde a los poetas románticos como Adolfo Berro o Juan Carlos Gómez, uno no tiene más remedio que preguntarse con nostalgia cómo se ha quebrado en nuestra crítica esa tendencia uruguaya a generar geniales cascarrabias ilustrados, inaugurada por Zum Felde y cuyo último exponente activo es Homero Alsina Thevenet.
En el Proceso Intelectual del Uruguay Zum Felde escribe sobre Berro -quien con John Keats comparte al menos el haber muerto de tuberculosis a los veintipocos años-: "La estrofa lírica de Berro es aún más floja y ripiosa que en la mayoría de sus congéneres, pareciendo casi un balbuceo; y su lenguaje, está demasiado plagado de tropos prestados por los románticos mayores, incluído Echeverría, quien tampoco, a su vez, los tenía muy propios"
Berro muere en 1841, a los 22 años y su muerte fue motivo de desgarrado dolor del ambiente intelectual uruguayo. En su entierro, que Zum Felde describe como "una especie de apoteosis" y junto a su tumba, nace el arquetipo del poeta romántico uruguayo: Juan Carlos Gómez.

"El vacío que dejó en el ambiente literario la desaparición prematura de Adolfo Berro fue ocupada por Juan Carlos Gómez, quien inició su carrera el día mismo en que aquél fuera enterrado, y junto a su tumba, recitando un poema elegíaco. Gómez, tan joven, en aquel año ’41, como su amigo muerto, continúa a Berro, por así decirlo, y llega a ser más plenamente lo que aquél sólo alcanzó a esbozar: el tipo representativo y simbólico del romanticismo en el Uruguay; y si no por la obra, por la vida, al menos"
Gómez es caracterizado por Zum Felde como el más genuino representante romántico, una especie de Quijote trasnochado que encarnaba el espíritu romántico "no porque haya realizado una obra literaria de valor permanente, ni su acción política haya sido fecunda, sino precisamente por haberse frustrado en lo uno y en lo otro"

La desdichada vida de Gómez es despiada y cómicamente relatada así por Zum Felde, el salado: "Toda su vida pública y privada es un romance caballeresco. Sus primeros versos juveniles, inspirados por la muerte temprana de su amigo Adolfo Berro, son recitados ante esa tumba. Adolescente aún, se enamora de una mujer, despidiéndose de ella al expatriarse, cuando el Sitio, en rimas acongojadas. La pálida doncella de sus sueños, su ideal Dulcinea, se convierte luego en la esposa de un personaje del Cerrito, don Carlos Villademoros, de quien ya dijimos su afición a las letras clasicistas. Muerta poco después, de una conmoción nerviosa, provocada por un bárbaro episodio del Sitio, Gómez, en su lejano exilio, permanece por siempre fiel al culto de aquel frustrado amor, llevando sobre el pecho el medallón con el retrato y el rizo de la amada, cuyo recuerdo lo acompañó hasta el fin de su desolada soltería. Cuando vuelve a Montevideo, su primera visita es para la tumba de Elisa, cuya memoria evoca en tiernas y dolidas estrofas."

Es notable que Zum Felde no se prive de anotar, como al pasar, lo tragicómico del hecho de que Elisa se haya casado con un cultor de la literatura académica como Villademoros, que alternaba la construcción de dramas patrióticos en verso (como Los Treinta y Tres, del cual Zum Felde dice que está "bien construído, pero de lenguaje académico y pomposo, incongruente en boca de los poco letrados héroes criollos") con letrillas eróticas. Una tragedia horrible, de la que la muerte vino a salvar a Elisa y a Gómez.

Perdónenme las características de este post largo y caprichoso, pero si escribo esto aquí es porque es totalmente imposible escribirlo en otro lado. Me persigue Keats, pero no hablo de Keats, de quién poco podría decir, sino de lo que he llegado a releer debido a la persecución de su fantasma.
En esas derivaciones lectoras he terminado hojeando Seymour, una introducción, de J. D. Salinger. Allí Buddy Glass, quien está siendo casi amenazado por el resto de sus hermanos para que "haga algo con la poesía de Seymour" llama a su hermana Boo Boo y le pregunta si hay algún poema de la primera juventud de Seymour que le gustaría ver incluído en el cuento que está escribiendo. "Su elección no resultó tan conforme a mis propósitos como yo hubiera deseado, y por lo tanto es un poco irritante, pero creo que lo superaré. El poema que eligió, lo sé, fue escrito cuando el poeta tenía ocho años: "John Keats/John Keats/John/Por favor ponte el pantalón".

Hay que decir que Seymour es esencialmente un poeta fascinado por la poesía oriental, que escribe y recita poesía china y japonesa desde los 11 años. El último poema de Seymour lo escribe en japonés, la tarde de su suicidio: "un haiku redondo, de estilo clásico, en el papel secante que cubría el escritorio en su habitación de hotel".
Pero volviendo al poema de John Keats... el traductor al español de Salinger no tiene más remedio que sacrificar el contenido en aras de conservar la rima. El original es: "John Keats/John Keats/John/ Please put your scarf on". Bufanda, no pantalón.

No he releído Seymour... completo y no recuerdo si hay algún comentario ulterior sobre el poema a John Keats, más bien tiendo a pensar que no. ¿En qué está pensando Seymour cuando escribe este poema? es algo que me he venido preguntando todos estos días. Y, arriesgandome estúpidamente a ser objeto de burla de cualquier experto salingerita que ande por ahí, confieso que solo se me ocurren dos y en las dos "bufanda" es fundamental. La primera es que, como saben, Keats murió tuberculoso. Su enfermedad se agravó en 1820, a raíz de un fuerte enfriamiento. De ahí que Seymour -tan dado a creer en anteriores encarnaciones- le ruega a un John Keats todavía vivo que se ponga la bufanda. La segunda lectura es respecto a la edad de Seymour y su condición de poeta: hay un dejo de orden maternal en el consejo de ponerse la bufanda antes de salir. Seymour, él mismo John Keats, retrata en el poema el absurdo de mandarle ponerse la bufanda a un gran poeta, en una especie de protesta de niño genio.

No muy brillante de mi parte, lo sé, pero es que estos versos corrientemente citados para demostrar que Seymour no era tan genio como se pretende dado que escribía unos versos tan banales, no me resultan banales en absoluto. La decepción de Buddy ante la elección de Boo Boo parece ir en esa dirección, pero yo creo que es genial que Salinger haya elegido esos versos, en apariencia poco pretenciosos. Y creo que la decepción de Buddy se debe a que no ilustran acabadamente lo que viene diciendo de la poesía de Seymour y no a que no sean buenos. Es para mí excelente el efecto que producen los dos primeros versos, la repetición del nombre completo del gran poeta romántico, contrapuestos con la familiaridad de los dos últimos: John/Por favor ponte la bufanda.

OK, pero sigamos con el fantasma de Keats que ha motivado este post alarmante. El viernes llegó a mis manos un ejemplar de Set. 14, 2003 del suplemento 'Culture', de The Sunday Times. El suplemento en cuestión es una revista de 86 págs. que contiene reseñas de todo lo que pueda englobarse bajo el rubro "cultura", pero sus notas están regidas por la agenda cultural, es decir, lo que pasa esa semana específica en exposiciones, discos, publicaciones, radio, televisión, etc. Digamos que si comparáramos al Times con, digamos, El País, el 'Cultural' de El País de Uruguay equivaldría al 'Times Literary Suplement' y el suplemento 'Culture' a una especie de 'Sábado Show', aunque el 'Culture', al lado de éste, parece la Enciclopedia Británica.
(Y perdonen, pero tengo que decirles esto: en el cuarto de al lado y mientras esto escribo, Remo ha escogido escuchar The Queen is Dead y escucho, atónita a Morrisey cantando "A dreaded sunny day/so I meet you at the cemetry gates/Keats and Yeats are on your side")

Decía que, en el 'Culture', encontré una reseña sobre el libro Dylan’s visions of sin de Christopher Ricks. La reseña, de John Carey, se titula 'As good as Keats?' y comienza: "¿Es Bob Dylan tan excelente poeta como John Keats? La alta y la baja cultura se han estado peleando sobre esta cuestión desde que David Hare la formuló en 1992. Acusaciones de esnobismo vuelan de una dirección y de filisteísmo desde la otra. Christopher Ricks, profesor de Humanidades en la Universidad de Boston es un agudo analista del estilo en poesía, cuyos libros cambiaron la manera en que toda una generación ha leído a Milton y a Keats."

Según el reseñador, Ricks fracasa miserablemente en su intento de probar que la excelencia de Dylan como poeta es comparable a la de los grandes poetas ingleses: "Lo que paradojicamente demuestran las comparaciones de Rick no es lo igual que es Dylan a estos poetas sino lo diferente que es. Una y otra vez, cuando compara un fragmento de una canción de Dylan con un verso de Tennyson o Hopkins o Larkin, la diferencia es espectacular. Los poetas son articulados y cadenciosos, mientras que las palabras de Dylan parecen inertes, torpes y curiosamente carentes de ritmo. La razón obvia de que esto suceda es que Dylan no es un poeta sino un creador de canciones. La música y el acto de tocarlas/cantarlas son necesarias para completar su arte y le agregan dimensiones que son inaccesibles a la poesía como texto. (...) Juzgar una canción de Dylan como si consistiera sólo de palabras en la página es tan miope como considerar que las odas de Keats serían mejores si las cantáramos".

Termino, por fin, este exorcismo, confiando en el poder mágico de estas palabras prestadas y convenientemente modificadas: "John Keats/John Keats/John/Please, leave me alone."

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Thursday, May 13, 2004

Una mina de libros

"Si hay algo en la naturaleza menos susceptible a propiedad exclusiva, es la acción de la fuerza de pensamiento llamada idea, que un individuo puede poseer en exclusividad mientras la guarde para sí mismo, pero desde el momento en que es divulgada, es posesión de todos y quien la recibe no puede ya desposeerse de ella. Su peculiar carácter, es que nadie posee menos porque todos la posean en su totalidad. El que recibe una idea de mi parte, recibe instrucción propia, sin disminuir la mía; como el que enciende una vela con la mía, no disminuye mi luz.
Las ideas deben diseminarse libremente de uno a otro alrededor del planeta -para la educación moral y mutua de los hombres y para mejorar su condición- y por su carácter, parecen haber sido diseñadas por la naturaleza para expandirse como el fuego por todos lados, sin disminuir su densidad en ningún punto y, como el aire que respiramos, moverse de modo que nuestro ser físico sea incapaz de confinarlas o apropiarse de ellas exclusivamente. Las invenciones no pueden, en consecuencia y por su naturaleza, ser objeto de propiedad"
Thomas Jefferson

Aprovechando el escaso tráfico que tiene este blog, posteo este link, verdadero festín para la mente. Divúlguenlo discretamente. (Y, por favor, no me digan que Jefferson tenía esclavos. Sí, los tenía y está muy mal. Pero los hits son hits, y los misses son misses. No se trata de una apología de Thomas Jefferson, sino de algo que si viviera hoy, no diría ni en sueños.... No puedo imaginarme nada más divertido que se pueda citar a Jefferson ante las majors defensoras del copyright).

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Wednesday, May 12, 2004

Sobre la prensa, la libertad y la pereza

Hace tiempo escribí un artículo que llamaba la atención lo canalla que es el periodismo -fundamentalmente el televisivo- en Uruguay. El medio más poderoso y el que menos informa, o más bien, el que más se ocupa en desinformar. Puedo entender los intereses políticos y económicos tras los canales, lo que no puedo entender es que el desprecio por la audiencia deba llegar a tales extremos. Los ejemplos sobran: Rodríguez Stratta y Daniel Lucas como críticos cinematográficos, Angel Ma. Luna como analista en el noticiero del 10, Julio Alonso repitiendo por enésima vez "¡miren que shopping!" en un viaje a cualquier rincón del globo, o Roberto Moar conduciendo un programa de música infamemente llamado "El 5to. Stone", que es como llamarlo "el prescindible", lo que puede ser visto como honestidad inconsciente por parte de Moar. Un capítulo aparte merecerían los "hijos de": el hijo de Cacho, el hijo de Muñoz y ahora el hijo de Kesman. El problema es que la televisión nacional no sólo está sembrada de malos periodistas sino que hasta los que son más o menos ejercen su profesión como empleados públicos. Ver la retrasmisión de la F1 relatada por Uberti-Bonavena puede equivaler a no enterarse de nada de lo que está sucediendo en el circuito y enterarse de cualquier otra cosa, como lo que sucede en la NBA. So it goes.

Una breve visita a lo que ofrece Internet, muestra a las claras que con una pizca de orgullo por el ejercicio de la profesión, cualquiera puede informar. Y que la prensa, aún la más conservadora, discute con mayor profundidad los temas que en este pobre páramo donde campea la desidia.

Hace semanas que se vienen repitiendo en los noticieros las fotos de los torturados de la cárcel iraquí de Abu Ghraib. A estas alturas si veo una sola vez más la montaña de cuerpos, el encapuchado sobre el cajoncito conectado a unos cables y las caras sonrientes de los y las soldados norteamericanos, voy a tirar la tele por la ventana.

Sin embargo, nadie se ha movido un milimetro de repetir lo que a su vez repiten sin cesar los compactos de las cadenas de las que compran los derechos. A nadie se le ha ocurrido hacer la más mínima investigación para saber qué se dice, qué se discute, cuando ni siquiera tienen que pagar derechos de nada, sólo ampararse en el derecho a citar algo que está publicado en la web, de la misma manera que citan lo que se publica en los diarios locales. Es que esto implica trabajar, leer, mantenerse informado. Algo que de ninguna manera hará ningún periodista de la televisión nacional.

Evidentemente no pueden hacer lo que yo voy a hacer a continuación, que es traducir el trabajo de otros periodistas. Lo hago citando las fuentes y con el solo fin de ponerlo a disposición, dado que ya lo está para cualquiera que lo busque y sepa leer en inglés.

Pero lo que sí pueden hacer es peinar la prensa internacional y hacer un informe propio de la recepción de las noticias en el resto del mundo.
Si lo hicieran, notarían, por ejemplo, que la prensa conservadora de los Estados Unidos discute mucho más profundamente el tema de la guerra de Irak que cualquier medio uruguayo y que las posturas cubren un espectro amplísimo de posiciones, desde los que a pesar de estar a favor de la guerra son extremadamente críticos con la administración Bush, hasta los que culpan de lo sucedido a las mujeres, las feministas, los musulmanes o la izquierda académica, como ha publicado Media Matters for América y que gentilmente he traducido para las masas de lectores de este blog.
Por otra parte, la revista electrónica Salon tiene una sección semanal llamada Right Hook (Gancho de Derecha) que recoge los comentarios de la prensa conservadora. Se puede leer traducido (y muy levemente editado cuando los argumentos se repetian) aquí. Y en inglés, aquí.

La particularidad de reproducir los comentarios de la prensa conservadora se debe a que es más interesante escuchar lo que tienen ellos para decir en estos momentos que escuchar el sonsonete condenatorio usual de quienes se oponen a esta guerra.

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Bienvenidos al desierto de lo real

Siguiendo con los atentados del World Trade Center, he leído el artículo donde Slavoj Zizek cita las palabras de Stockhausen que motivaron el post de hace un par de días (gracias ezek!) y lo he traducido, medio a las patadas porque es laaargo (13 páginas) para quienes no puedan o les de pereza leerlo en inglés. Les ruego disculpen los posibles errores y el enrevesamiento de algunas frases (o más bien de todas).
El artículo es interesante, pues aborda muchos de los temas a que apuntaba en el post sobre los dichos Stockhausen y otros, con mayor rigor y a veces llegando a muy discutibles conclusiones. Algunas cosas de las que habla Zizek han quedado viejas a la luz de lo sucedido en Afganistán y en Irak (el artículo fue escrito antes que los EEUU decidieran tomar represalias), más exactamente a menos de un mes de los ataques, pero vale la pena echarle una ojeada.

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Tuesday, May 11, 2004

Abdala enseña sus secretos

¡Juaj! tal vez se trate de que están seguros que en las próximas elecciones les van a romper el culo. Leed este artículo publicado en la página de Alternativa Joven/Foro Batllista. Siempre a la retaguardia.
Y en el home Alternativa Joven emula a Galerías y afirman que el pensamiento de Lula es afín al del Foro. Una mina de oro, la página.

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Monday, May 10, 2004

Stockhausen prendido a la TV

El comentario de Stockhausen sobre los atentados de 9/11 posteado por ezek en su blog se ha quedado "at the back of my mind" (si alguien sabe como traducir esta expresión sin recurrir a inexactos términos psicoanalíticos, por favor avisen). Traduzco:

"Lo que ha pasado ahí es: ahora debes reajustar tu cerebro. La más grande obra de arte imaginable por el cosmos. Las mentes lograron en un solo acto lo que los músicos solo podemos soñar: personas que ensayan diez años como locas, preparándose, fanáticamente, para un concierto y después mueren. Hay personas así de focalizadas en una performance y como consecuencia, 5000 personas son despachadas al más allá, en un momento. No puedo estar a su altura. Contra eso nosotros, como compositores, no somos nada"

Ahora, lo que ha llevado a la humanidad a reajustar sus cerebros ha sido la "obra de arte" reproducida por televisión, no de la performance real, presenciada por un puñado de atónitos peatones. Lo raro es que Stockhausen (que sigmur me diga si el tipo se apellida "Depósito") no se pregunta por qué el 9/11 es arte y no lo fueron las bombas de Hiroshima y Nagasaki.

No hay dudas que las imágenes del 9/11 son impactantes, pero lo son aún mas en la medida que pueden reproducirse una y otra vez, desde diferentes ángulos, que pueden pasarse al derecho y al revés, y, sobre todo, que sucedió en el mundo real. Lo que lleva a Stockhausen a elevarlo a categoría de obra de arte es su perfección técnica, su bella magnificencia y su efectividad para cambiar las mentes de toda una generación de humanos. Sin embargo, lo que verdaderamente lo impacta es lo último. Si no hubiese tenido esa doble condición de real/irreal, no hubiera producido el efecto de obligar al espectador a reajustar su cerebro. La genialidad de los atentados es que son, a la vez, espectaculares, limpios, reales, su referente más inmediato es la ficción y que su público es televisivo. ¿Por qué el hongo atómico, que puede considerarse estéticamente bello, no fue considerado una obra de arte por nadie? ¿Por qué si reúne las mismas condiciones de enunciación que las enumeradas por Stockhausen respecto al 9/11? ¿No ha debido la humanidad reajustar su cerebro después de Hiroshima y Nagasaki?

Tal vez lo fantástico del 9/11, es que haya obligado a los occidentales a reajustar sus cerebros frente a un hecho mucho menos importante que las bombas atómicas o el holocausto judío. Pero en esos casos se vio primero o más repetidamente lo horroroso del hecho y el costado estético quedó sepultado, al contrario que con los atentados del 11-S. Y todo gracias a la magia de la televisión y la posibilidad de verlo limpiamente y casi en directo, morbosamente repetido hasta la fascinación: una espectacular matanza real sin sangre. Better than Hollywood. Video-clip soft snuff para las masas.

El 11 de setiembre está sembrado de performances que pueden mirarse desde el costado estético, como por ejemplo el hecho de obligar a miles de newyorkinos a discar la fecha del día compulsivamente en sus teléfonos y sin darse cuenta del significativo absurdo: 911 911 911. Pero bueno, no seamos tan superficiales...

Lo de Stockhausen no es para nada nuevo y sólo da cuenta del poder y la fascinación que ejerce la televisión sobre los occidentales. El asesinato en relación con las bellas artes es tan viejo como Thomas De Quincey:

"Cuando un crimen se haya(...), no ya cumplido, o no (...) esté para cumplirse, sino sólo esté a punto de realizarse, y a nuestros oídos llegue el rumor, tratémosle moralmente por todos los medios. Pero suponed que ya ha sido realizado, y que podéis decir de él teteles tai, está terminado o (según la expresión adamantina de Medea) eirgas tai, está hecho, es un hecho cumplido. Suponed al pobre asesinado que ya ha dejado de sufrir, y el miserable que ha matado, desaparecido no se sabe donde; suponed, en fin, que nosotros hubiésemos hecho todo lo posible para pescar al fugitivo, pero todo en vano (...) Ahora, pregunto yo: ¿a qué conduce emplear más la virtud? Bastante se ha concedido ya a la moral: ahora le toca el turno al buen gusto y a las Bellas Artes. Ha sido una triste cosa, sin duda, muy triste; pero no podemos remediar nada. Por esto es por lo que sacamos el mejor partido de una cosa mala; y puesto que es imposible justificarla desde el punto de vista moral, tratémosla estéticamente y veamos si en ese sentido se la puede estimar. He aquí la lógica del hombre sensible; ¿qué deduciremos de aquí? Secaremos nuestras lágrimas, y acaso tengamos la satisfacción de descubrir que una cosa que, considerada moralmente, era chocante y no podía defenderse, si se la somete a los principios del buen gusto se convertirá en una obra meritoria."

Y el de la estética de la guerra tan viejo como Marinetti:

"Desde hace 27 años nos estamos alzando los futuristas en contra de que se considere a la guerra antiestética... Por ello afirmamos: la guerra es bella porque, gracias a las máscaras de gas, al terrorífico megáfono, a los lanzallamas y a las tanquetas, funda la soberanía del hombre sobre la máquina subyugada. La guerra es bella, porque inaugura el sueño de la metalización del cuerpo humano. La guerra es bella, ya que enriquece las praderas florecidas con las orquídeas de fuego de las ametralladoras. La guerra es bella, ya que reúne en una sinfonía los tiroteos, los cañonazos, los alto el fuego, los perfumes y olores de la descomposición. La guerra es bella, ya que crea arquitecturas nuevas como la de los tanques, la de las escuadrillas formadas geométricamente, la de los espirales de humo en las aldeas incendiadas y muchas otras... ¡Poetas y artistas futuristas... acordaos de estos principios fundamentales de una estética de la guerra para que iluminen vuestro combate por una nueva poesía, por unas artes plásticas nuevas!"

Todo muy viejo, como Stockhausen.



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Cosechando libros

La Feria de Tristán Narvaja sigue siendo un paraíso para quienes sin tener dinero para comprar libros, terminan comprando toneladas. Voy a la feria cada domingo desde que tengo memoria y no hay nada que pueda compararse al placer de volver a casa y pasarse la tarde del domingo leyendo fragmentos de lo que se ha cosechado. Antes -hace unos escasos 25 años- iba a la feria a canjear mis 40 historietas semanales y todas eran consumidas en un ejercicio de lectura veloz entre las 3 y las 6 de la tarde del domingo antes de tener que ir a lo de mis abuelos. Luego los leía con cuidado, pero de todas maneras no pasaban del miércoles, para desesperación de mis padres. "¿No podés guardarte alguno para el resto de la semana?" Nope.
Ahora es mas o menos igual, solo que no debo rendir cuentas más que al apretado espacio donde guardar la cosecha semanal.
Hoy, mis $ 230 (menos de U$S 10, para los miles de lectores allende fronteras) rindieron los siguientes volúmenes:

-The innocent, de Ian McEwan
-Passing by (Selected essays 1962-1991), de Jerzy Kosinski
-Danse Macabre, de Stephen King
-El crimen perfecto, de Jean Baudrillard
-Microcosmos. Cuatro mil millones de años de evolución desde nuestros ancestros microbianos, de Lynn Margulis y Dorion Sagan

Para empezar, McEwan, del que he leído con entusiasmo Amor perdurable, con menos entusiasmo pero con reverencia Amsterdam y con absoluta incredulidad y aburrimiento Entre las sábanas. Pero con McEwan pasa lo mismo que con Martin Amis: escribe malos cuentos con los argumentos que no puede transformar en novelas. McEwan escribe fantásticamente bien y es un placer transitar páginas y páginas de estructura escondida bajo una prosa que fluye tan natural y compulsivamente. Lo que tiene de malo es que al final, cuando te paras a pensar lo que has estado leyendo, pues, no es mucho. Pero que bien escrito debe estar que no te das cuenta hasta que te deshaces del libro. En Amor perdurable, la escena que abre el libro está tan perfectamente narrada que es como si McEwan la hubiera cronometrado para poder filmarla. El personaje principal está con su amada, en un picnic de ensueño y un globo aparece en el cielo, con dos hombres colgando de la canastilla. El pasaje del globo por el cielo y los personajes que corren a su encuentro, convergiendo hacia un punto, corriendo hacia la colisión (la del globo pero fundamentalmente la de ellos) que les cambiará la vida y que es la base de la novela, es memorable. Y el lector está irremediablemente enganchado cuando apenas ha empezado a leer.

El libro de Kosinski, igual que el de Stephen King, llamaron mi atención porque son ensayos escritos por narradores. Los de Kosinski son sobre arte, judaísmo, lugares, personas. Abro al azar y leo: "Al igual que la obra de un autor, la libertad existe solo cuando es constantemente interpretada -aun malinterpretada". Polaco de nacimiento, vivió en los EEUU desde 1957. Kosinski es quien personifica al revolucionario ruso Grigori Zinoviev, en Reds, de Warren Beatty. Se suicidó en Nueva York el 3 de mayo de 1991.

Danse Macabre King es sobre el terror como género, en literatura, cine, radio, etc. No soy fan del género, ni fan de Stephen King. He leído alguna de sus novelas, cuando mi padre decidió que era mejor comprarme libros que tener que canjear las 40 revistas cada tres días. Eso fue como a los 13 años, una buena edad para leer a Stephen King. Y, hasta donde recuerdo, leí Carrie, Cujo, La zona muerta, Ojos de fuego... Danse Macabre está dedicado, entre otros a Jorge Luis Borges y Ray Bradbury "great writers of the macabre", lo que respecto a Borges y aún respecto a Bradbury es bastante extraño. Capaz que se refiere al libro sobre Evaristo Carriego...

El libro de Baudrillard, yo qué sé, a mi me entretiene Baudrillard, es pensamiento inconsecuente, se lee como una novela sin personajes, un monólogo interior sin pretensiones estéticas. No es ni literatura ni filosofía. Para lo primero le falta voluntad de belleza en la escritura, para lo segundo le falta rigor. Baudrillard es un perezoso y por eso me entretiene. Se supone que el libro es sobre "el asesinato de la realidad". Es como digo: un policial sin víctima y sin asesino, en el que sólo se hablará del arma y de si extrañamos o no extrañamos al muerto. Baudrillard termina negando a Nico: "I’ll not be your mirror".

Para terminar, Microcosmos de Margulis-Sagan propone abordar la evolución del planeta desde la perspectiva de que ha sido "un fenómeno bacteriano" como manera de "compensar la visión antropocéntrica tradicional que sobrevaloraba de manera inapropiada la especie humana".
Confieso que una frase en particular llamó mi atención, en vistas de mi posteo anterior sobre Richard Dawkins y es esta: "En la práctica filosófica que se conoce como 'deconstrucción', se desmantelan oposiciones jerárquicas poderosas mediante un proceso dual que Jacques Derrida caricaturiza o caracteriza como 'inversión y desplazamiento'. Dicho proceso se ha llevado a cabo en Microcosmos: la humanidad es deconstruída al invertir la jerarquía tradicional que situaba a los humanos, surgidos recientemente, en la cúspide de la evolución y a los organismos 'inferiores', más antiguos, por debajo." Ah, Sokal, ¿científicos pidiendo prestado a las humanidades? How come?
El bonus track de este libro es que encontré algo dentro: un pasaje de COT hasta Piriápolis, del 17/7/98 a las 15:30. Valor $ 41. Por lo menos por ahora, Microcosmos ha resultado un libro útil para reflexionar sobre la inflación.

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Sunday, May 09, 2004

Bush y los marrones

A estas alturas uno cree que nada de lo que pueda dejar escapar Bush por su hocico pueda sorprender. Y sin embargo ¡sorpresa!. Capaz que todo el mundo ya ha leído sobre esto, pero yo acabo de toparme con los comentarios de la conferencia de prensa de Rose Garden del 30 de abril hoy, a través de un artículo del Washington Post (hay que registrarse).
El Presidente de la Galaxia dijo textualmente:
"Hay mucha gente en el mundo que no cree que aquellos cuya piel es de distinto color a la nuestra puedan ser libres y autogobernarse"
"Rechazo esto. Lo rechazo enfáticamente. Yo creo que los musulmanes pueden autogobernarse. Yo creo que aquellos cuya piel no es necesariamente... cuya piel es de otro color que blanca, pueden autogobernarse"

Ahora ya lo saben: los norteamericanos son blancos y los musulmanes, a pesar de no ser blancos, pueden ser libres y autogobernarse. Holy Shit! y Bush sigue primero en la intención de voto de los norteamericanos para las próximas elecciones.

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Pixies, en vivo en el Coachella Valley Music & Arts Festival - 1/5/2004

Acá podés bajar la banda de sonido de Pixies, el regreso.

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Saturday, May 08, 2004

Arriba el trabajo

Ayer todos estaban emocionados. FUNSA, la empresa de productos de caucho reabre, gracias a la locura colectiva de un grupo de sindicalistas y a la locura individual de un empresario que cree que el proyecto es viable. Es casi el argumento de una película de Ken Loach.
Ayer se remataron las instalaciones y alli estaba el empresario, los obreros, el Ministro de Industria y los canales de televisión para asistir al histórico suceso. El empresario ofertaría 1 millón de dólares. Si no había otras ofertas, el sueño se haría realidad.
¿El sueño? Trabajar. Parece mentira.

Al final todo anduvo bien y todos lloraban, se abrazaban y gritaban, eufóricos. Los sindicalistas abrazaban al Ministro, el Ministro besaba al empresario, las esposas de los obreros lloraban, los periodistas relataban cómo los sindicalistas tuvieron que tomar tranquilizantes para ir al remate porque temían que apareciera un inversor argentino o brasileño que les pinchara el globo. Pero, por suerte, nadie apareció. Ahora, el sindicato devenido cooperativa, tendrá el 30% de las acciones. Y todos esperamos que les vaya bien, que ojalá el empresario sea un buen empresario y los trabajadores buenos trabajadores. Pero con eso no basta. Lo fundamental, lo que garantizará que esta industria funcione está, como casi todo, en manos de los políticos.
Que una empresa como FUNSA se remate en 1 millón de dólares y que no haya mejor postor habla a las claras de lo que han sido las políticas nacionales respecto a la industria. Así se fueron cerrando fábrica tras fábrica, porque Uruguay era un "país de servicios" y una "plaza financiera" que terminó siendo un país de serviles saqueados.

Bien, allá va FUNSA y ojalá le vaya bien. Ojalá esta emoción colectiva de ver una fábrica que abre, en lugar de una que cierra no sea efímera y la gente se acuerde de comprar productos FUNSA y deje de comprar cubiertas con nombres malos (¿quién en su sano juicio anda en un auto con cubiertas FATE o PIRELLI? Es tentar la suerte...)

Todo esto me hizo acordar a Pájaro de Celda, del gran Kurt Vonnegut, y a Powers Hapgood, activo sindicalista que terminaba dos por tres entre rejas, e hijo del fundador de la Empresa Conservera Columbia, experimento de democracia industrial, en la que los obreros participaban de los beneficios de la empresa:

"En aquellos tiempos, la historia del movimiento obrero era una especie de pornografía, y aún más en éstos. En las escuelas públicas y en los hogares de la gente bien, era y sigue siendo bastante tabú contar historias de los sufrimientos y hazañas de los obreros.
Recuerdo el nombre del juez. Se llamaba Claycomb. Lo recuerdo con tanta facilidad porque su hijo 'Moon' y yo habíamos sido compañeros de clase en el instituto.
El padre de Moon Claycomb, según Powers Hapgood, le hizo esta pregunta justo antes de la hora de comer:
-Señor Hapgood -le djio- ¿Por qué un hombre de familia tan distinguida y de tan excelente educación como usted decidió vivir así?
-¿Por qué? -dijo Hapgood, según Hapgood-. Por el Sermón de la Montaña, Señoría.
Y el padre de Moon Claycomb, dijo esto entonces:
-Se aplaza la sesión hasta las dos."




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Thursday, May 06, 2004

Comprobando obsesiones

En los últimos dos días me he dado cuenta que ciertos autores me obsesionan. Algunos, como Nabokov, me maravillan. Otros como Richard Dawkins me enfurecen.
Dawkins es un biólogo que escribe exitosos libros y es titular desde 1995 de la cátedra Charles Simonyi de Divulgación Científica de la Universidad de Oxford (cátedra creada por el ingeniero de Microsoft que dirigió el equipo que creó Word y Excel).
Si en mi post de hace unos días expuse algunas de las razones por las que me maravilla Nabokov, éste será sobre algunas de las razones por las que me enfurece Dawkins.
Las fundamentales son su patente soberbia y su limitada inteligencia. Son condiciones que frecuentemente van de la mano, pero tal vez sea aún más grave en un científico, que no puede menos que recordar, cada mañana en cuanto abre los ojos, que no es más que una mota de polvo en el cosmos. Para peor, Dawkins ha hecho carrera a fuerza de escribir sobre lo que evidentemente no cree, es decir, que la ciencia y la poesía deben ir de la mano.
Dawkins es un inventor de verdades aparentes, un fabricante de falsos silogismos, un razonador que no razona y un odioso sembrador de intrigas.
Hace tiempo escribí un artículo sobre el tema, que los que estén aburridos pueden leer acá. Ese artículo tenía un recuadro que era sobre Dawkins y los Archivos X, que si tienen ganas está aquí.
Dawkins debe ser uno de los que más disfrutó la zancadilla que le hicieron Sokal y Bricmont a ciertos intelectuales y a las ciencias sociales en general, poniendo al descubierto el abuso que hicieron algunos de ellos de conceptos extrapolados de las ciencias duras y aplicados al psicoanálisis, los estudios literarios, etc. Tanto ha disfrutado Dawkins de la broma, que -a 8 años del incidente- todavía la sigue citando, como compruebo en el artículo escrito respecto al Daily Telegraph/BASF Science Writer Award:
"Disciplinas envidiosas, que no voy a nombrar, esconden su falta de contenido tras enormes nubes de obscuridad deliberada, hilarantemente desenmascaradas por Alan Sokal en su falso artículo 'Hacia una hermenéutica transformadora de la gravedad cuántica', publicado por Social Text para la vergüenza del "Colectivo Editorial" de esa revista pretenciosa".

Pero esto no sería nada, si no fuera porque a Dawkins parece importarle un rábano el ridículo. Porque en el artículo del Telegraph se pregunta por qué no puede un escritor científico ganar el Premio Nobel de Literatura, si lo que él llama "la realidad" es más interesante -y más importante- que la ficción. Dawkins, quien tanto disfrutó la patada en el culo (que no digo no haya estado bien dada) que expulsó a los "humanísticos" de las ciencias quiere ahora expulsar a los literatos de la literatura. Y no le importa empezar por aconsejar a los escritores científicos, como escribir bien, siguiendo estas sencillas reglas:

-Traten de iluminar e inspirar, no de impresionar.
-Los adjetivos y los adverbios son regalos especiales. Raciónenlos.
-La voz pasiva no es recomendada ¿ven a lo que me refiero?
-Usen frases cortas, pero varíen la extensión o vuestra prosa será aburrida.
-Lean lo escrito en voz alta y afinen el oído a su cadencia.
-Enamórense de vuestro tema, no de vuestra prosa.
-Azucen la imaginación del lector con un hecho sorprendente, con una metáfora fresca o poniendo patas arriba algo familiar, o filtrándolo a través del lente de un alien o del ojo de un marciano.
-No se priven de escoger la palabra exacta, aun cuando lleve al lector al diccionario. Un diccionario nunca le ha hecho daño a nadie y una palabra puede entusiasmar por su propia condición de no ser familiar.

Le faltó recomendar que no olviden pasarle al texto el corrector ortográfico de Word.... Si siguen los consejos de Dawkins, los escritores científicos estarán tan cerca de ganar el Nobel de Literatura como Juan Ramón Carrasco.

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Tuesday, May 04, 2004

Cinemateca Uruguaya: Y la vida continúa

Terminó el XXII Festival Internacional y para los que no se aburrieron de ver cine, posteo un adelanto de la programación que viene (mayo 15 a junio 14), ya que el boletín todavía no salió, para que vayan ahorrando ojo hasta entonces.

En Cinemateca 18/Viva la diferencia

Cuatro películas que estuvieron en el Festival: "Trouble Every Day", de Claire Denis (canibalismo y amor. Dicho sea de paso, en Argentina se estrenó con el título de "Sangre Caníbal", para total desorientación los amantes del cine gore), "Memoria del saqueo", de Pino Solanas (Argentina: de la dictadura al primer mundo y de vuelta al tercero en 1.6 segundos), "Ser y tener", de Nicolas Philibert (un documental sobre un maestro y sus alumnos en una comunidad rural de Francia que tal vez reedite el éxito de "Todo comienza hoy" y lleve a todo Magisterio de vuelta al cine. Contar el argumento y que alguien vaya a verla sería un logro, así que mejor vayan y vean o esa semana dedíquenla a las otras salas) y "Juntos" de Chen Kaige (adolescente chino virtuoso del violin va a Berlín y la reflexión de rigor sobre el efecto sobre los valores producto del extraño comunismo chino. Favorita del público en varios festivales, lo que solo indica que le gusta a quienes pueden incidir hasta en los asuntos más pelotudos, es decir, lo contrario de lo que les pasa a los chinos)

En La Linterna Mágica/De la temporada

"Valentín", de Alejandro Agresti, "Río místico", de Clint Eastwood, "Jinete de ballenas", de Niki Caro; "Alguien tiene que ceder", de Nancy Meyers, "Capitán de mar y guerra", de Peter Weir; "Camino a casa" de Jeong-hyang Lee y "Perdidos en Tokio", de Sofia Coppola.
De estas no digo nada porque de eso se ocupan Rodríguez Stratta y Daniel Lucas ¡fantásticas! ¡magníficas! ¡espectaculares! Como todo lo que traen las distribuidoras. Sin embargo, de lo que traen esto es lo mejor a juicio de CU. Si no las vieron, aprovechen.

En Sala Cinemateca/Cine de la India/Musicales franceses/Los 7 pecados capitales

Semana de Cine Indio: Siete películas largas y raras: cine industrial indio, también llamado cine de Bollywood. No transcribo los títulos porque si alguien conoce alguna tendría que regalar otro Porsche 911 y me quedan pocos.
Musicales franceses: una contradicción de términos. Ciclo solo para Luis Trochón y los alumnos de su escuela de comedia musical. También para quienes les falte ver "French Can Can" de Renoir. Acompañan "Los paraguas de Cherburgo" de Jacques Demy, "Piaf, el gorrión de Paris", de Guy Casaril y "Conozco la canción", de Resnais.
Los 7 pecados capitales sólo por competir con la nueva serie televisiva Los 10 mandamientos y que la gente vaya al cine, ademas de que es más divertido pecar que obedecer. El ciclo comienza con "Seven", de David Fincher (Brad Pitt, Kevin Spacey y un envío por courier) y sigue así:
De parte de la Gula: "Delicatessen", de Jean-Pierre Jeunet y Marc Caro (deben quedar pocos que todavía no la hayan visto: canibalismo y humor negro) y "Como agua para chocolate" de Alfonso Arau (aprovechando el boom de mujeres latinoamericanas que quisieron probar que podían escribir y lo hicieron tan mal que probaron la tesis de que -por lo menos Allende, Serrano, Mastretta y Esquivel- deben dedicarse a no joder al género humano y a los árboles publicando porquerías.)
De parte de la Envidia: "Amadeus", de Milos Forman (película que calza perfecto a este pecado y que sólo volvería a ver para oir la música -la de la contagiosa risa de Tom Hulce-. La de Mozart es mejor escucharla en casa. Y además de que al pobre Murray Abraham siempre le toca ser malo ¿será tu ascendencia árabe Rua'fo?)
De parte de la Avaricia: "La tierra prometida", de Andrzej Wajda (ni idea, pero es sobre la Revolución Industrial y si hay luditas debe ser buena. Pregúntenle a alguien que sepa de cine) y "El socio del silencio", de Daryl Duke (idem anterior. Es que la avaricia no es lo mío)
De parte de la Lujuria: "Juegos nocturnos", de Mai Zetterling (una película sueca sobre la lujuria podía ser interesante en 1975. Para peor la directora era actriz. No la veré por miedo a soñar con Liv Ullman) y "Cuentos inmorales/Las heroínas del mal" de Walerian Borowczyk (la vi en Centrocine hace casi 20 años. La cola de intelectuales barbudos incapaces de pisar el Luxor daba vuelta la esquina. ¿La película? No me acuerdo)
De parte de la Cólera: "Mad Max", de George Miller (¿quién no vio "Mad Max"? Mel Gibson antes de Cristo. Puede ser divertido volver a verla en el cine, con ánimo festivo previa alteración de los sentidos, antes de que se la copia se rompa del todo y no la pasen nunca más) y "Aguirre, la ira de Dios" de Herzog (impresionante y con Klaus Kinski.)
De parte de la Pereza: "Buenas noches, Alejandro", de Yves Robert (cualquier película sobre la pereza tiene mi voto. No vi esta pero tal vez escuche "I’m only sleeping" de Los Beatles, "Abajo el trabajo", de The Supersónicos, "Lazy" de David Byrne leyendo "Nearer, My Couch, To Thee", de Thomas Pynchon y después vaya) y "Las vacaciones del Señor Hulot", de Jaques Tati (no hay nada menos gracioso que un francés. Tati está más allá de mi comprensión, pero si está de vacaciones, tiene mi voto).
De parte del Orgullo: "La clase gobernante", de Peter Medak (aristócrata inglés con complejo de superioridad, como todos los ingleses sean de la clase que sean), "Los Europeos", de James Yvory (o como hacer mierda a Henry James. El orgullo europeo sobre los brutos norteamericanos. Peor es el orgullo de los brutos norteamericanos admirado por algunos europeos de hoy, prueba irrefutable de que el progreso no existe.), "Alejandro el Grande", de Theo Angelopulos (OK, Angelopulos puede ser un maestro pero para mi es como el Chavo: no le tengo paciencia. Hagan lo que quieran, pero son 199 minutos, Grande, como Alejandro) y "La caída de los dioses", de Luchino Visconti (un five star de CU, signifique lo que signifique)

En Pocitos/Reposiciones/Ver Cine/Trasnoches

"Good Morning, Babilonia", de los hermanos Taviani (yo, personalmente, les tengo cariño a los Taviani y el primer boletín de CU llevaba la foto de "La noche de San Lorenzo" en la tapa), "Japón", de Carlos Reygadas (buenísima o un embole. Depende exclusivamente del espectador. Un embole) y "El círculo" de Jafar Panahi (del ganador del XXII Festival Internacional con "Sangre y Oro" -de la cual la crítica dijo que era el "Ghost Dog" del cine iraní...pobre Panahi)-. El appeal de Panahi no es tan inmediato como el de Kiarostami, pero vale mucho más de lo que parece a primera vista. Sus películas siempre quedan rondando y los yanquis lo deportaron por no tener visa de tránsito cuando venía a Montevideo. Tiene todo para ser un héroe)
Ver Cine no es un ciclo, sino una excusa para juntar películas. Esta vez son: "Sabiduría garantizada", de Doris Dörrie (excelente, un hit de Doris, directora alemana y genial), "Bajo la arena", de François Ozon (no la vi porque el tema me impresiona. El marido de ella desaparece en el mar. Una pesadilla por la que no pienso pasar), "Goya", de Saura (sólo para los fans de las "obras completas" de un autor), "Lucía y el sexo", de Julio Medem (horripilante. La vi en un Festival Internacional, un viernes santo que diluviaba. El fusca se quedó sin batería y terminó indignamente arriba de un remolque, me mojé hasta los huesos y terminé yendo a ver esta porquería. Eso me pasa por dejar el 911 en casa. Volviendo a la película, al lado de "Lucía y el Sexo", "La pelota vasca" es erótica)
Trasnoches: "Nenette y Boni", de Claire Denis (como para acompañar los caníbales de Cinemateca 18), "Fresa y Chocolate", de Gutiérrez Alea (homosexuales en la Cuba de Castro. Ideal para estabilizarse después de leer el discurso del 1º de mayo de Fidel), "Dulce Libertad", de Alan Alda (acabo de enterarme que es director. En el elenco él mismo, Michael Caine, Michelle Pfeiffer, Bob Hoskins. Falta Woody Allen, pero es suficiente para despertar curiosidad), "Trainspotting" y "Tumba a ras de tierra", de Danny Boyle (ya las vieron y al lado de "Vidas sin reglas", "La playa" y "Exterminio", son la octava maravilla del mundo).

En Sala 2/El cine del PSOE

Medio aburridón, a estas alturas. Pero Zapatero a tus zapatos, ahí va, sin comentarios: "Las bicicletas son para el verano", de Jaime Chávarri, "Entre tinieblas", de 'Atenti al golpe' Almodóvar, "El Sur", de Víctor Erice, "¿Qué hecho yo para merecer esto?" de 'Ooops I did it Again' Almodóvar, "Los santos inocentes", de Mario Camus, "Tasio", de Montxo Armendáriz, "La corte del faraón", de José Luis García Sánchez,"La vaquilla", de Luis G. Berlanga, "Matador", de 'Ya es tarde para cambiar' Almodóvar, "Wherter", de Pilar Miró, "El bosque animado", de José Luis Cuerda, "El dorado", de Carlos Saura, "Las cosas del querer", de Jaime Chávarri y "La noche oscura", de Carlos Saura. Se preven multitudes luchando por los 62 asientos.

Dodecá: Maleducados/Revisiones/Saura

Maleducados: Para acompañar "Ser y tener" y para que la gente de Magisterio cruce el arroyo Malvín van "Las fresas de la amargura", de Stuart Hagman (estudiantes norteamericanos frente a la guerra de Vietnam. Para reafirmar tu desprecio por gente como Frenesí Gates -¿no será la hermana de Bill?-), "Panorama uruguayo" (las películas de Mario Handler antes de dedicarse al reality show lumpen. Entre ellos "Líber Arce" y "Me gustan los estudiantes"), "Los cuatrocientos golpes" de Truffaut (una obra de arte, para los que saben), "Todo comienza hoy", de Bertrand Tavernier (un hit para futuros maestros, aunque serían mejores maestros si -además de Tavernier- fueran a ver "Mercano el marciano", de Juan Antín -la mejor pelicula argentina para el commentatore sigmur- ¿qué se puede esperar de un lugar como Magisterio, donde la libido está ausente -por la ausencia casi total de estudiantes masculinos- y la perspectiva son 40 infantojuveniles diarios a cambio de cuatro pesos? Bien dicen que es un sacerdocio: célibe, adoctrinante, aburrido y al pedo).
Revisiones: "Trono de sangre", de Akira Kurosawa (Macbeth en Japón y con ¡Toshiro Mifune!), "La vida y nada más", de Bertrand Tavernier (pacifismo de la mano del buenazo de Tavernier), "Blow Up", de Antonioni (adaptación de "Las babas del diablo", de Julio Cortázar, con Vanessa Tumbaroja), "La delgada línea roja", de Terrence Malick (más pacifismo, esta vez post segunda guerra. Estan Sean Penn y Nick Nolte. Digamos que un empate), "El juego de la banca", de Robert Connolly (vas a ver "Memoria del saqueo", y a los pocos días la completás con "El juego de la banca". Te comprás un fierro y enfilás para Cárcel Central), "El huevo de la serpiente" (Bergman dirige a Carradine y lamentablemente también a Liv Ullman. Nada que ver con María Urruzola y muchísimo menos con Beatriz Flores Silva).
Saura: Trilogía flamenca con "Bodas de Sangre" (Saura y Gades on Lorca.), "Carmen" (Saura y Gades on Bizet), "El amor brujo" (Saura y Gades on de Falla) y, como para cambiar de tema, "Las dulces horas" (guerra civil revisited).

Está bien, un post atorrante pero tal vez útil por un par de días para los ansiosos.

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