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Monday, September 27, 2004

Quemá esas cartas

Me ha llegado un mail hoy en el que me invitan a firmar la carta que sigue a continuación. No voy a decir nada sobre el contenido de la misma, ni si la firmaré o no. Sólo quiero decir lo siguiente: tras esta carta siguen casi 150 firmas de escritores muy conocidos y otros no tanto -prosistas, poetas-, de profesores de literatura, periodistas.

La pregunta, que me acosa es la siguiente: ¿cómo diablos pueden haber escrito una carta tan horrorosa? ¿Es que quieren dar la impresión de necesitar ayuda urgente?

Hey, ¡sois escritores! ¿Cómo pueden escribir frases como "el acceso a la cultura es un derecho humano" (patentada por los ahorristas del Banco de Montevideo, que -mutatis mutandis- claman por sus sacrosantos ahorros, también devenidos 'un derecho humano')? ¿Cómo pueden garrapatear sin ruborizarse "Tenemos que recuperar la dignidad y la esperanza."?
¿Qué fatigada pluma enumeró la necesidad de defensa "de los más desvalidos, de los niños de la calle, de los enfermos, de los ancianos, de quienes no tienen trabajo ni techo."

¡Vuestro oficio es escribir, amigos! ¡Es más: vuestro oficio es conmover, zopencos! ¿Es que os habéis salteado el curso de Retórica?

Y otra pregunta que me inquieta: ¿no hubiera sido más, hum, elegante, escribirle al compañero Tabaré diciendo que el mejor apoyo a la cultura sería dedicar los mayores recursos posibles a la enseñanza? No sé, es que queda medio enrarecido el aire y cualquier malpensado (Dios no lo permita, compañero Tabaré) podría inferir que inevitablemente los firmantes (muchos de los cuales conozco, estimo y sé que están lejos de cualquier segunda intención) serán algunos de los beneficiados de un mayor apoyo a la cultura y a las artes (además de la población en general, por supuesto).

En fin, los dejo que se deleiten con esta gema de nuestros intelectuales...

Montevideo, setiembre de 2004

Compañero Tabaré Vázquez

Candidato a la Presidencia por el Frente Amplio - Encuentro Progresista - Nueva Mayoría

Los abajo firmantes, escritores residentes y no residentes en Uruguay manifestamos públicamente nuestra adhesión al Frente Amplio - Encuentro Progresista - Nueva Mayoría.

Convencidos de que la fuerza política que usted preside es la única capaz de operar los cambios imprescindibles para el país, le brindamos todo nuestro apoyo para su triunfo en las próximas elecciones.

La falta de trabajo y la crisis general del país nos incluye. Miles de hogares reproducen en sus hijos la pobreza que arrastran consigo a veces durante generaciones. Esa miseria material se multiplicará infinitamente si no atendemos también la exclusión cultural a que ha sido condenada gran parte de la población.

El acceso a la cultura es un derecho humano y, como la mayoría de ellos, fue desatendido por los gobiernos blancos y colorados.

Tenemos que recuperar la dignidad y la esperanza. Necesitamos uruguayos sensibles y reflexivos, ciudadanos críticos y libres, capaces de pensarse a sí mismos y pensar al país que desean construir. De la cultura dependerá la capacidad de los ciudadanos de elaborar ideas y buscar significaciones.

La atención a la cultura en todas sus formas y el procurar el acceso a ella de los miles de uruguayos que hoy están excluidos es una apuesta a la justicia, la libertad y a la profundización de la democracia. La cultura supone la educación como derecho y necesidad.
Deberán ir juntas si de veras pretendemos cambiar la situación actual.

La cultura no es ajena a la política. Los escritores hemos estado siempre con las causas democráticas y populares. En los años duros la dictadura no logró el apoyo de ningún escritor de relevancia. Resistimos donde pudimos y como pudimos. Algunos de los nuestros pagaron un alto precio por no claudicar: perdieron sus trabajos, fueron obligados al exilio o acabaron en las cárceles. Todos padecimos exclusión, marginamiento y censura. La cultura, con su enorme poder simbólico e identitario, permitió y potenció la resistencia.

Ante la terrible situación que vive el país apoyamos el Plan de Emergencia propuesto por su fuerza política y ofrecemos nuestro esfuerzo para poner en práctica esas medidas que no admiten postergación. Entendemos que para poder cumplir con todas ellas es indispensable una atención especial a la cultura. No hay inclusión social sin cultura.

El FA-EP-NM cuenta con nuestro voto para el triunfo del 31 de octubre y con nuestro trabajo para reconstruir el Uruguay. De su gobierno esperamos no solamente esfuerzo sino también pasión en la protección y defensa de los más desvalidos, de los niños de la calle, de los enfermos, de los ancianos, de quienes no tienen trabajo ni techo. De su gobierno esperamos atención y sensibilidad a la cultura, a la creación artística en todas sus formas. Una sociedad existe por la cultura que vincula a los individuos que la integran.


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Sunday, September 26, 2004

El rostro del Gran Hermano

Hoy estuve donde estoy casi todas las mañanas de domingo. Y compré algunos libros, entre ellos 1984, de Orwell, en inglés, nuevo y barato, pero con una tapa que me ha dejado boquiabierta.





Yo he tenido libros con tapas aún más desopilantes que ésta, pero hay algo que, respecto a 1984 me llama poderosamente la atención y es que cada vez que alguna ilustración muestra a Big Brother, siempre está tan alejado del modelo obvio -Stalin- que me pregunto por qué.
En esta tapa en particular, Big Brother es una especie de Fumanchú de ojos celestes. ¿Qué toman los ilustradores? ¿Por qué no convidan?

En la página 2 del libro dice textualmente: "BIG BROTHER IS WATCHING YOU, the caption said, while the dark eyes looked deep into Winston's own". Y en la primera describe a Big Brother y su "heavy black moustache". Yo siempre me imaginé a Big Brother parecido a Néber Araújo...

Esta edición que compré hoy es inglesa, supongo que incluso escolar, impresa por Heinemann Educational Books Ltd. de Oxford. El ilustrador debe haber leído el libro y si aprobó literatura sin haberlo leído, podía haberlo hecho por lo menos con las dos primeras páginas.
Un capítulo aparte merecen las caras de Winston y Julia. Son la esperanza pintada. Miran al cielo. Sonríen. Se abrazan.

Pero pongamos que el ilustrador estuviera medio loco o cansado de ilustrar libros de Dickens o harto de la literatura en general. Todavía nos quedan los responsables de la editorial. ¿A nadie le pareció rara la cubierta?

Recuerdo vagamente la edición de 1984 que me prestó sigmur. Tengo idea que el Big Brother de la tapa se acercaba un poco más a la idea, pero creo que también tenía algo extraño. O no tenía bigote, o tenía lentes.
Anda, sig, ve a fijarte.



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Wednesday, September 15, 2004

Piques

La gente de Pro Arte Clips no se cansa de poner a disposición información sobre becas, concursos (no me digan que esperan que ponga ¡sorteos!) y todo tipo de piques para quienes no sepan que hacer con tanto tiempo libre.
Pueden suscribirse al envío de esta información por e-mail uniéndose al grupo.

Aquí un resumen:

Premios y Concursos
Becas
Oportunidades


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Monday, September 13, 2004

Juro que lo oí decir.

El título de este post es el de un poema de Roque Dalton, poeta y guerrillero salvadoreño del FMLN -muerto en acción en 1975, por una bala disparada por sus propios compañeros- que dice lo siguiente:

"Salvo en una sociedad completamente justa, lo mejor de la vida es ser jefe"

Si bien el nombre del poema connota un desacuerdo incrédulo con el contenido de la frase, esta incredulidad dista de ser común. Y, por lo menos a mí, me resulta una frase sumamente lógica, si bien odiosa la corrupta ideología que la subyace.

En una sociedad totalmente justa, los jefes son los que se llevan la peor parte. Son quienes deben estar en primera línea. Son los responsables directos. Los que guían al resto. Los que trabajan más. Y eso, dejando a un lado la grandeza de espíritu, el amor por un emprendimiento en el que se cree a pies juntillas, es, sin dudas, lo peor del mundo.

En la sociedad en la que estamos acostumbrados a habitar, los jefes suelen ser los que trabajan menos, se llevan más y corrientemente roban hasta fundir la empresa, el país o lo que sea que se supone guían, asunto que les importa una mierda pues ya han reunido lo suficiente para no tener que trabajar o han generado la corrupción necesaria a su alrededor como para dedicarse a los negocios aledaños con alegría.

Es decir, si dejamos de lado esas minucias como la moral, la ética y las buenas costumbres, pues, la frase que Roque Dalton escucha, incrédulo, parece sumamente lógica y compartida por la mayoría de las personas: es la regla. No creo que hayan muchos que crean honestamente lo contrario. No sobran los voluntarios a jefes cuando hay mucho trabajo y pocos beneficios de por medio.

El título de el post vale para esta frase que escuché y que también me parece sumamente lógica, aunque no deja de ser levemente descorazonadora, ya que el final, si bien es un chiste, deja sentada la actitud que seguirán miles de personas si la premisa se cumple y porque la misma está expresada condicionalmente solo en parte, ya que incluye una afirmación sobre la naturaleza de los sujetos en cuestión que aceptamos estamos dispuestos a tolerar si la condición no se cumple:

"Estoy deseando apretar el acelerador y llegar a octubre y echar a esta manga de ladrones hijos de puta a la mierda. Ahora, si estos otros hijos de puta también son ladrones, tipo ná..."

Los tiempos cambian, Bob, al menos un poco.


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Friday, September 10, 2004

Yo, robot

Hace un tiempito escribí un post entreverado titulado 'La inmortalidad', en el que me sumaba a la hinchada de la biologia y la química si es que se quiere encontrar una solución a mediano plazo para el problema ese de morirnos. Si bien me resultan muy atractivas las predicciones de Hans Moravec & Cía. de que el futuro del hombre es cibernético, sigo convencida que estamos tan lejos de ello como Stirling del carisma.

Mientras los científicos tratan de resolver problemas como el de la energía que mantendría a un robot en funcionamiento de manera autónoma (la más reciente y genial de las mismas, la de Eco Bot II, que atrapa moscas y transforma el azúcar de su exoesqueleto en electricidad -lo malo es que el robot tiene aliento a mierda, porque de alguna manera tiene que atraer a las benditas moscas- transformándose en el único robot en el que su fuente de energía viene a él sin intervención humana), decía que mientras los científicos tratan de resolver todo tipo de problemas para nuestro futuro destino de chapa, yo me descorazono horriblemente cuando veo las soluciones robotizadas con que contamos hoy, digamos, un software de traducción, por ejemplo.

Abro mi absolutamente inútil Power Translator y tipeo una frase de la canción de los Moldy Peaches "Who's got the crack". La frase es sencilla: "it's hard to be a garbage man when a sailor stole my glove".
El traductor dice que esa frase es: "es difícil ser un hombre de basura cuando un robo del marinero mi guante". Aha.

Siempre vuelvo, mas o menos, a ese tema (y a Nabokov y a la Feria y a dos temas más, tal mi rango) y ahora veo que eso de la inmortalidad a través de las máquinas tiene ya una existencia real, aunque un poco retorcida.

Leyendo diarios encuentro esta noticia en el Toronto Star. Jim Sulkers, un hombre de unos 50 años que vivía en Winnipeg y que padecía esclerosis múltiple estuvo dos años muerto en su apartamento. No estaba en contacto con su familia ni tenía amigos y como su pensión era transferida a su cuenta bancaria y sus cuentas eran pagadas por débito automático, el sistema siguió actuando eficientemente, aún cuando Jim se había muerto dos años atrás. El cuerpo, en lugar de pudrirse se momificó (ah, los químicos, supongo que Jim tomaba muchos medicamentos).

No hay dudas que la sociedad posthumana hace rato que existe y la inmortalidad financiera está probada y garantizada. Mientras tanto, la Humanidad vuelve al antiguo Egipto. Eso es progreso.


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Monday, September 06, 2004

Leaks

¿Qué estoy haciendo que no escribo nada? Estoy siendo perseguida por Kilgore Trout.
Muchos autores se han inventado alter egos a quienes atribuir las novelas y cuentos que ellos no tenían ganas de escribir, pero que no resistían las ganas de contar. Borges, Lem, Vonnegut y muchos más, en un recurso tan viejo como la literatura misma. Pero mi preferido de todos los tiempos es el gran Kilgore.

Mi historia favorita escrita por Kilgore Trout, mencionada por Vonnegut en "Desayuno de campeones" no tiene título. Es la parábola a la vez más despectiva y más estremecedoramente esperanzada sobre la raza humana:

"Kilgore Trout escribió un cuerto corto que era un diálogo entre dos pedazos de levadura. Discutían el posible sentido de una vida que se limita a comer azúcar y a ahogarse en su propio excremento. Debido a su limitada inteligencia nunca llegaron a darse cuenta que lo que estaban haciendo era champagne."

En "Desayuno de Campeones", Vonnegut le ha atribuído a Trout 117 novelas y 2000 cuentos cortos y ha contado, en mayor o menor detalle, la trama de algunos de ellos en varios de sus libros.

El asunto es que ayer encontré un libro que se me había perdido. Lo había comprado en la mesa de ofertas de la Feria del Libro, y después de leer unas páginas en un bar -la misma noche que lo compré- el libro desapareció por completo. Pensé que lo había dejado olvidado allí y que nunca más lo vería, hasta que, buscando otro libro, ayer me topé con él. Se trata de "Venus On The Half Shell", de Kilgore Trout.

OK, la novela fue escrita por Philip José Farmer y siempre me he preguntado por qué Vonnegut le permitió a Farmer escribir la novela de Trout que Fred Rosewater lee en el capítulo 9 de "God Bless you, Mr. Rosewater". Tal vez le pareció divertido.

Si no me equivoco, Venus... es la única novela de Trout de la que Vonnegut transcribe una cita textual. Mi memoria puede estar fallando penosamente, pero creo que en ningún otro libro Vonnegut transcribe la prosa de Trout, sino que hace un resumen del argumento. Esto esta perfectamente justificado ya que Vonnegut ha dicho que la prosa de Trout era espantosa y que lo único bueno eran sus ideas.
Leyendo el fragmento de "Venus..." transcripto por Vonnegut uno no puede menos que estar de acuerdo.

No pasa lo mismo con el libro de Farmer. Y yo supongo que tal vez sea en parte esto lo que a la postre molestó al bueno de Kurt, ya que muchos vieron en el libro de Farmer "el inimitable estilo de Vonnegut". En la reseña de Venus... aparecida en 1975, el crítico del National Observer escribía:

"No se puede leer más de una docena de páginas al azar en Venus sin tener la certeza moral de que se está leyendo a Vonnegut. El estilo es inconfundible. Los patrones de pensamiento, la construcción de la trama, el uso del lenguaje, el Weltanschauung -es totalmente Vonnegut".

Sin embargo la escritura de Farmer no es ni como uno podría imaginarse la prosa de Trout ni tampoco es la de Vonnegut. Demasiado pulida para Trout y demasiado obvia para Vonnegut. No es que Venus... sea un libro rematadamente malo. Es bastante entretenido y por momentos cómico, pero la escritura de Farmer se convierte demasiado rápido y persistentemente (cada dos frases más o menos) en un cliché del estilo Vonnegut.
Por otra parte, supongo que Vonnegut subestimó la fama de su criatura y al final le molestó que Farmer lucrara con ella y para peor mediante una mala imitación de su propio estilo. Bueno, pero esta es una historia antigua.

El otro episodio Trout-related es que me topé con el video de "Desayuno de campeones", la película de Alan Rudolph, protagonizado por Bruce Willis y Nick Nolte (¿por qué el insufrible de Nolte ha sido elegido para actuar no en una, sino en dos películas basadas en libros de KV?).
La película es bastante horrible y dudo que quien no haya leído el libro pueda siquiera empezar a comprender qué es lo que está sucediendo. Supongo que es bastante difícil llevar ese libro al cine, pero el problema fundamental fue tratar que fuera una comedia de golpe y porrazo y que, horror, horror, termina con Trout metiéndose dentro de un espejo por el que se entrevé un paisaje -supuestamente- paradisíaco y dos niños angelicales que transforman a Trout en un niño.

Está bien, había un problema: en la novela de Vonnegut, el autor es un personaje de la novela. Es decir, el autor implícito irrumpe en el mundo que ha creado para revelar a Kilgore Trout que es un personaje literario creado por él y que, de ahí en adelante lo va a dejar en paz. La película escoge excluir completamente al personaje del autor. Supongo que el director, al elegir el tono de comediola, debió excluir la voz y la ulterior presencia del narrador como personaje. En vistas de la exclusión de la voz narrativa (que hubiera permitido darle a la película mucho mas interés, coherencia y profundidad) no podían hacer que en el medio apareciese un tipo diciendole a Trout "yo soy el autor", pues los confundidos espectadores hubieran pensado que se trataba de Dios (y no se hubieran equivocado del todo). Sobre el final de la novela Trout le pide al autor "que lo vuelva joven" y de ahí el disparate de Trout volviéndose niño a través del espejo, aprovechando la creencia de Trout que los espejos son puertas hacia universos paralelos.

OK, todas las películas adaptan libros, pero nunca he logrado comprender por qué cambian ciertas cosas muy importantes y otras, insignificantes.
Por ejemplo: en la novela, Dwayne Hoover, el personaje principal, es viudo. Su esposa se suicidó. En la película no lo es y a pesar de que su esposa está medio loca, todo termina en una escena de reunión familiar entre el loco Dwayne, la loca Celia (ambos en vías de recuperación) y el hijo homosexual.
Y, como ejemplo de cambio insignificante (y que a Benito le parecerá el cambio más importante e imperdonable) en la novela, Dwayne Hoover se lleva muy bien con su perro labrador, mientras que en la película, el perro, un bulldog, odia a Bruce Willis. ¿Por qué? ¿Por qué?

Tal vez Vonnegut haya cometido dos grandes errores en su vida: uno, permitirle a Farmer escribir bajo el nombre de Trout. Y dos: adaptar sus novelas al cine.

Ya en 1974, Vonnegut le había permitido a un reportero personificar a Trout, para simular una entrevista en la que Trout entrevista a Vonnegut. Curiosamente, en esa entrevista Vonnegut afirma:

Wanda June, se adaptó para el cine. Matadero Cinco también. Vonnegut dijo que Wanda June era "una de las películas más avergonzantes jamás filmadas" pero dijo, admirado que George Roy Hill había hecho una "correcta adaptación" de Matadero Cinco. ''Babeo y cacareo cada vez que miro esa película", dijo, pero prometió: "no voy a tener más nada que ver con las películas por una única razón: no me gustan las películas". "Las películas son estrepitosamente reales", explicó. "Demasiado permanentes, demasiado industriales para mí. Como hijo de la Depresión, tiendo a quejarme de lo que es demasiado caro para ser divertido. (...) Después de la experiencia de lo caro que es hacer una película, volví a estar interesado por los libros y decidí que estoy más de acuerdo con ellos y que son más fáciles de hacer. El gran problema con la letra impresa es, por supuesto, que es una forma elitista de arte" -afirmó. "La mayoría de la gente no sabe leer demasiado bien...."


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